El Ayuntamiento de Haría acordó, en sesión plenaria extraordinaria celebrada este lunes, conceder a Rafael Betancort Feo y a Leonor María Josefa Cabrera Rodríguez los 'Premios Haría 2016', destinados a aquellas personas o instituciones "con una trayectoria destacada y que han contribuido con su trabajo al progreso y desarrollo del municipio norteño". El Consistorio ha destacado la "labor social, humanitaria y de voluntariado" que ambos han mostrado "a lo largo de toda su vida".
Rafael Betancort Feo nació el 22 de octubre de 1921 en el pueblo de Máguez, donde transcurrió su infancia y adolescencia, ayudando a sus padres en las tareas agrícolas. Socio fundador del Centro Democrático de Máguez, desde joven destacó por su habilidad y su afición al deporte, especialmente la lucha y la bola canaria.
En la década de los sesenta comenzó a trabajar como maestro albañil en el acondicionamiento de los primeros Centros Turísticos de la isla, desempeñando su labor en Jameos del Agua, Cueva de Los Verdes, Montañas del Fuego, Mirador del Río, Monumento al Campesino y Jardín de Cactus.
"Pero la habilidad con la que las manos de don Rafael Betancort colocaban con esmero cada una cada de las piedras volcánicas no era comparable con la extraordinaria destreza de la que hacía gala para curar las dolencias musculares", explican desde el Ayuntamiento norteño. Y es que, desde pequeño, aprendió con su padre a ‘arreglar desconches’, como popularmente se conocían estas dolencias, "de forma altruista y desinteresada", agregan.
"El sebo de cabrito y la maestría de sus manos eran suficientes para aliviar el dolor de cualquier contractura. Futbolistas, luchadores, deportistas, vecinos del municipio y del resto de la isla de Lanzarote acudían a diario a su casa para lograr calmar los dolores musculares, sin importar el día y la hora", relata el Consistorio.
Leonor Cabrera, 40 años cuidando de los enfermos "más desfavorecidos"
Por su parte, Leonor María Josefa Cabrera Rodríguez nació el 14 de noviembre de 1927 en el pueblo de Haría. Desde muy joven participó y colaboró activamente con la parroquia de Haría, "no solo impartiendo clases de catecismo, sino también en todas aquellas actividades humanitarias y de acción social donde se la necesitase", subrayan desde el Ayuntamiento.
Así, "su amor por la cultura, especialmente por la música, hace que forme parte activa del coro del grupo de teatro del pueblo de Haría, bajo la dirección de doña Encarnación Rodríguez Lasso, y el acompañamiento musical al piano de doña Isabel López, así como del grupo de jóvenes, donde se encontraban don Juan Luzardo Rodríguez y don Miguel Torres González, quienes amenizaban con sus serenatas las noches de verano en Punta Mujeres", relata el Consistorio.
El traslado de su residencia en la década de los años setenta a La Palmas de Gran Canaria supuso también un cambio destacado en su vida. Por un lado, logró estudiar y formarse en el Conservatorio de Música de Las Palmas, donde cursó los estudios de Teoría de la Música, Canto y Guitarra, y por otro inició una nueva andadura de compromiso social como miembro de la Pastoral de la Salud, acompañando a los enfermos más desfavorecidos en clínicas, hospitales y en su propia casa cuando así la necesidad lo requiriese.
"Más de cuarenta años lleva doña Leonor Cabrera Rodríguez cuidando y velando para que los enfermos sin familia, con grandes carencias económicas y afectivas, puedan vivir con dignidad, aportándoles para ello el consuelo y la ayuda afectiva que necesitan", destaca acerca de ella el Consistorio.