Mientras Lanzarote avanza en la fase 2 de la desescalada, la actividad económica en las zonas turísticas de la isla continúa prácticamente paralizada. Tanto en Playa Blanca como en Puerto del Carmen, la mayoría de los negocios no ha abierto todavía sus puertas, a la espera de que se empiece a recuperar el turismo, lo que no ocurrirá hasta principios de julio, en el mejor de los escenarios.
Tiendas, bares y restaurantes continúan así con la verja bajada a lo largo de toda la avenida de Puerto del Carmen, donde contrasta esa ausencia de actividad con la que sin embargo se registra en las playas, ahora llenas de residentes en la isla.
La misma escena se repite también en Playa Blanca, donde los lanzaroteños son los que han acudido en los últimos días a las playas de la localidad, mientras la mayoría de los negocios permanecen cerrados y solo algunos han empezado a trabajar.
En cuanto a Costa Teguise, ya desde la fase 1 empezaron a abrir sus puertas algunas terrazas como las del Pueblo Marinero. Sin embargo, al igual que en Playa Blanca y Puerto del Carmen, en la primera línea de playa continuaban cerrados prácticamente todos los bares, restaurantes y tiendas.