Lanzarote se solidariza con los damnificados que han dejado las inundaciones y deslizamientos de tierra causados por las lluvias torrenciales y los vientos huracanados del Tifón Durian, que ha devastado toda la zona central y oriental de Filipinas. Hay más de 25.000 afectados, 250 desaparecidos y 380 personas muertas, al ser enterradas por ríos de barro, pero las cifras podrían aumentar considerablemente a medida que se vaya recibiendo más información de las regiones que quedaron incomunicadas.
La Cruz Roja de Filipinas (CRF) ha enviado por lancha varios equipos de rescate y evaluación a las zonas del archipiélago castigadas para valorar los daños. Las necesidades prioritarias son mantas, tiendas de campaña, alimentos y agua potable, así como materiales de construcción, equipos médicos y bolsas para cadáveres.
Dos equipos de evaluación integrados por expertos en logística y distribución de suministro de socorro, agua y saneamiento, y apoyo psicosocial y otro equipo de 10 colaboradores de la CRF, con botas de caucho, para llevar a cabo las operaciones de socorro desde un centro de ayuda, trabajan ya en las zonas más afectadas.
La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja enviará además dos equipos de evaluación y coordinación en el terreno para apoyar la intervención de urgencia de CRF.