El pintor Felipe Juan expone sus pinturas en la Casa Cerdeña de San Bartolomé hasta el 31 de mayo

La vitalidad de las flores como búsqueda de la naturaleza, también la humana

"La flor de loto es para los orientales lo que la rosa para el occidental"explicaba el crítico de arte Manuel Pérez durante la inauguración de la muestra artística del pintor Felipe Juan. La flor de loto y la rosa, son ...

16 de mayo de 2006 (09:10 CET)
La vitalidad de las flores como búsqueda de la naturaleza, también la humana
La vitalidad de las flores como búsqueda de la naturaleza, también la humana

"La flor de loto es para los orientales lo que la rosa para el occidental"explicaba el crítico de arte Manuel Pérez durante la inauguración de la muestra artística del pintor Felipe Juan. La flor de loto y la rosa, son protagonistas indiscutibles de la colección mostrada, que recoge su evolución artística de los últimos años. Lo que aparece en sus cuadros, son mucho más que flores que el pintor Felipe Juan utiliza para darse un paseo por la naturaleza, también la humana, para buscar el interior de las personas pero desde un punto de vista positivo "utilizo la vitalidad de las flores para explorar en la naturaleza del hombre".

Este pintor de Gran Canaria ha paseado su pintura por media España, Las Palmas, Madrid, Barcelona y ahora aterriza en San Bartolomé con una colección de pinturas al óleo, en la que no desaprovecha la utilización de otros materiales que le faciliten expresar su arte. Desde telas de saco que representan soles hasta un espejo en el centro del lienzo, forman parte de las escenas que muestra en sus cuadros "creo que muchas veces pasamos por el mundo sin mirarnos al espejo, es decir, sin saber quiénes somos y cómo somos, por eso me interesa que el espejo, forme un diálogo con el que lo está viendo", afirma Felipe Juan.

De su pintura colorista, han dicho los críticos que "rompe frontera y eleva el espíritu". Luz, calidez y sentimiento son algunas de las sensaciones que transmiten sus lienzos, que pueden verse hasta el próximo 31 de mayo en la Bodega de la Casa Cerdeña de San Bartolomé.

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