Fotos: Sergio Betancort
La Geria celebró este miércoles su día drande de las fiestas con la recreación de la vendimia tradicional, un homenaje a viticultores y bodegueros para festejar la llegada de la recogida de la uva, que se ha convertido en reclamo turístico y una forma de acercarse un poco a la historia y tradición de este Espacio Protegido.
Decenas de vecinos y turistas participaron activamente de la fiesta, que muestra el proceso de recolección de la uva y su trasporte al lagar a lomos de los camellos para su posterior pisado y obtención del mosto. Los camellos Careto y Andrés fueron los protagonistas de la jornada, acaparando flashes y miradas de grandes y pequeños durante los tres viajes que realizaron en busca de uva para trasportarla al antiguo lagar que conserva la Bodega La Geria, epicentro de los festejos.
El concejal de Medio Ambiente de Yaiza, Marcial Viñoly, fue el encargado de dirigir a Careto y Andrés, mientras los ediles de Festejos y Limpieza, Javier Camacho y Jonatan Lemes, ayudaron a Ramón Melián, propietario de la Bodega La Geria, y a un operario de la misma, en la recogida de la uva. Una vez en el lagar, los más pequeños se lanzaron a participar en el pisado de la uva y, poco a poco, muchos fueron los mayores que también quisieron probar la sensación y se fueron incorporando a la tarea.
La actuación de la parranda Los Salineros de La Hoya puso el toque folclórico a la jornada, consiguiendo que vecinos de la zona y turistas se animaran a bailar en esta fiesta que unos viven rememorando su infancia y otros empapándose de la cultura y tradiciones.
Misa en honor a la Virgen y tenderete canario
Ya por la tarde, en un ambiente más íntimo, los fieles se reunieron en la ermita de La Caridad para celebrar una misa, que contó con la actuación de la Coral de Yaiza, para agradecer a la Virgen de La Caridad la buena cosecha de este año, en la que se espera recoger más de tres millones de kilos de uva.
Sixto Álvarez, párroco de Yaiza y encargado de oficiar la ceremonia, lanzó un mensaje de positividad ante las adversidades de la vida poniendo como ejemplo al pueblo de Lanzarote, "que supo hacer de una tierra infértil, un lugar donde ganarse la vida". Al finalizar la función religiosa, el cuerpo de toque y baile de la Agrupación Folklórica Rubicón realizó su ofrenda a la Virgen en forma de actuación.
Los actos festivos en honor a la Virgen de La Caridad comenzaron la noche antes en la explanada de Bodegas Rubicón con un tenderte canario amenizado por la Parranda Janubio y la Parranda El Geito, en el que vecinos y turistas compartieron comida típica y vino de la tier
