La Policía Nacional ha encontrado pruebas que le permiten reconstruir lo que pudo suceder la noche en la que Juan Carlos Tejera desapareció, y que refuerzan la hipótesis de que el hombre, de 39 años, pudo ser víctima de un crimen. Según han confirmado a La Voz fuentes cercanas a la investigación, las evidencias hacen pensar a los agentes que dos o quizá hasta tres personas participaron en los hechos. Los rastros de Tejera se pierden en la escombrera de Argana, aunque la Policía cree que después pudo ser llevado a otro lugar.
Tras la desaparición de Tejera el viernes de madrugada, los agentes encontraron su vehículo en el barrio de Argana. Fuentes cercanas a la investigación confirmaron que el coche tenía manchas de sangre. Esos restos, sin embargo, se encontraban en el vehículo (concretamente en la puerta), pero no había manchas de sangre en el pavimento de la calle. Por eso, los agentes creen que cuando el vehículo fue conducido hasta ahí, Tejera ya no estaba dentro, y fue otra persona la que lo llevó hasta Argana.
La Policía comenzó entonces el seguimiento de las rodadas que había dejado el coche de Tejera, una pick-up. Las huellas del vehículo muestran que el coche circuló por caminos de tierra que conducen a la escombrera de Argana. Según esos trazos, en un momento determinado, la furgoneta subió por un terraplén unos 300 metros y, entonces, se paró.
El posible arma homicida, encontrada en la escombrera
En ese punto, la Policía ha encontrado huellas de talones de dos personas y manchas de sangre. Las huellas de las pisadas indican que había una persona a la derecha y otra a la izquierda, lo que hace sospechar a los agentes que Tejera fue arrastrado varios metros por esas personas, que lo agarraban de las axilas. Según lo referido por fuentes cercanas a la investigación, en ese lugar los rastros sugieren que esas personas se detuvieron. Después, se dieron la vuelta y, posiblemente, introdujeron a Tejera nuevamente en el coche.
En ese mismo punto apareció el segundo zapato de Tejera y también una barra de hierro con restos de sangre. Los agentes creen que podría tratarse del arma homicida utilizada para acabar, supuestamente, con la vida de Tejera. La teoría del homicidio se refuerza además con el hallazgo en ese mismo lugar de la cartera de Tejera, que todavía contenía su documentación y dinero en efectivo.
En base a estas evidencias, la Policía está buscando a entre dos y tres personas. Por un lado, están las dos personas que las pisadas apuntan a que arrastraron a Tejera, pero los agentes no descartan que una tercera persona aguardase en el vehículo. Además, creen que después de estar en la escombrera, estas personas podrían haber llevado el cuerpo a otro lugar, ya que hay indicios de que le volvieron a subir al coche, y también de que no estaba ya en el vehículo cuando fue conducido hasta Argana.