Del Castillo de San José fluyen unas notas que viajan en el tiempo hasta aterrizar en el Barroco. El culpable de esta retrotracción es un clavicordio de más de dos siglos de antigüedad. Los dedos de Javier Díaz, profesor de piano y música de Cámara, son los encargados de interpretar "Tocata en Re Menor", de Juan Sebastián Bach. Junto a él, Pablo Blanco, al clarinete, Salvador Santana, al saxofón, e Iván Curbelo, a la trompeta. Todos ellos procedentes del Conservatorio de Lanzarote, y juntos, como indica su propio nombre, forman el grupo: Ensemble Musicae Candelaria. "Llevamos dos años tocando, siempre con un tema en cada concierto: hemos hecho uno de música francesa, otro de música americana, e incluso rusa, pero siempre intentamos encontrar un fondo común para centrar cada repertorio", explica Javier Díaz.
Ahora inauguran el ciclo de "Música en el Museo" con un concierto homenaje a Joseph Mann, un melómano inglés afincado en Lanzarote, que además de su amor por la música clásica, restauró el órgano de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, en la Villa de Teguise. Ha sido precisamente la viuda de este músico quien ha donado este clavicordio, copia de un ejemplar del siglo XVIII. "El hecho de tocar un instrumento como éste te transporta un poco a otra época", explica Javier mientras lo afina. "Es una sensación muy buena, y nos hacía mucha ilusión hacer un concierto para mostrar al público como era la música en el siglo XVIII".
Lanzarote y la música clásica
Los cuatro músicos hablan de la situación de la música clásica en la Isla. "Está un poco verde, casi en pañales", asegura Iván Curbelo, trompetista. "Nosotros somos un oasis dentro de un desierto, porque aquí se valora mucho el folclore, mientras que hay una gran indiferencia frente a otros tipos de música, como la clásica". Los miembros de Ensemble Musicae Candelaria echan de menos un mayor apoyo por parte de las instituciones. "Es duro, estamos luchando contra viento y marea, sobre todo porque es difícil proponer este tipo de conciertos sin apoyo", explica Javier. "Sí, cada vez son más las dificultades y trabas que surgen a la hora de realizar un concierto", añade Iván.
La fuente de la virtuosidad
El Conservatorio de Música de Lanzarote es el germen de la música clásica en la Isla. Unos quinientos alumnos se dedican, día a día, a realizarse comomúsicos. Pero cuando superan el Grado Elemental, tienen que desplazarse a otro conservatorio, pues de momento, el de Lanzarote no cuenta con estudios de Grado Medio. "Llevamos cuatro años luchando para ampliarlo", asegura Salvador Santana, saxofonista. "Por ejemplo, ahora se ha abierto la prematrícula para el curso que viene y hay 300 preinscripciones, mientras que sólo pueden acceder al Conservatorio 70 alumnos al año", continúa Javier. "Si el Gobierno de Canarias y el Cabildo dieran más importancia a esto, no quedarían fuera ciento y pico aspirantes".
Al preguntar por la existencia de ayudas para la adquisición de instrumentos, los músicos sonríen con expresión incrédula. "¿Ayudas?, pregunta Iván. "Se recibe algún tipo de subvención pero nunca en la medida que se necesita", matiza Javier, "no se invierte mucho en Cultura".
Turismo de calidad cultural
Los chicos de Ensemble Musicae Candelaria proponen la música clásica como oferta turística en Lanzarote. "¿No quieren un turismo de calidad?", increpa Javier. "Pues si además de golf y hoteles ofrecemos conciertos de música clásica a unos turistas procedentes de Europa, que suelen tener una cultura musical muy rica, puede resultar una alternativa rentable para la Isla".
Ciclo de "Música en el Museo"
El Museo Internacional de Arte Contemporáneo inició el pasado sábado el ciclo "Música en el Museo". Tras dos años de andadura, el MIAC decidió poner este ciclo en manos de la asociación El Triángulo de Cuatro Lados. "El primer año que se organizó este ciclo, fue Benito Cabrera el encargado de organizarlo", explica María José Alcántara, directora del MIAC. "Y en esta ocasión le hemos dado la oportunidad a un colectivo de la Isla que viene abordando diferentes disciplinas artísticas". Este primer concierto, a cargo del grupo Ensemble Musicae Candelaria, inaugura un ciclo que estará compuesto por tres actuaciones. "Ésta es la primera, y después quedan dos más", indica María José, "una se hará en septiembre y otra a finales de año".
"Nosotros queríamos rendir homenaje a Joseph Mann, un inglés afincado en Lanzarote que hizo mucho por la música clásica en Lanzarote", explica Iñigo Castanedo, miembro de El Triángulo de Cuatro Lados. "Este instrumento es el 'abuelo' del piano, y tiene más de dos siglos", añade, refiriéndose al clavicordio. "La viuda de Mann lo donó, y nosotros hemos decidido aprovecharlo para homenajearle".
