Aunque ya estemos en pleno siglo XXI todavía quedan pequeñas poblaciones en las que el agua y la electricidad siguen siendo un auténtico lujo, como es el caso de la zona de La Geria, una pequeña población donde todavía resiste un núcleo de una docena de casas sin que ningún ayuntamiento les proporcione estos servicios. Una situación que los vecinos han aceptado desde hace décadas, recurriendo a todo tipo de estratagemas para conseguir encender las bombillas de sus viviendas, poder ver la televisión, planchar? Toda una aventura para los habitantes de la zona y las famosas bodegas que pueblan sus tierras.
"Hacia el año 1978 empezaron a funcionar algunos motores para proporcionar luz. Actualmente seguimos utilizando motores que funcionan con gasoil y placas solares con baterías. El agua nos la tienen que traer en camiones", comenta Bruno Hendriks, habitante de La Geria de origen alemán que desde niño ha vivido los pequeños cambios que se han experimentado en la zona, donde cuentan en la actualidad con una subvención para la colocación de placas solares que alivia, en parte, las necesidades eléctricas de la zona. "Antes teníamos que evitar encender algunas bombillas porque podía explotar la instalación si lo hacíamos", añade el vecino, que también señala la ausencia de una red telefónica con la que poder acceder a internet o a teléfonos convencionales.
¿Pero por qué esta ausencia de infraestructuras? La explicación está en el Plan Insular de Ordenación Territorial (PIOT), que prohíbe las obras subterráneas en la zona para el cableado. El Cabildo trabaja en la actualidad en conseguir la aprobación de una "suspensión especial" de este plan para poder electrificar la zona, en la que los vecinos pagan los mismos impuestos que el resto de lanzaroteños sin poder disfrutar de todos los servicios.
"Tenemos que tener mucho cuidado con la utilización de la electricidad. Hay que gastar poco y utilizarla únicamente cuando es necesario. Si controlas bien el gasto y no se consume demasiado es posible vivir con las placas solares, aunque la llegada de la electricidad supondría un gran cambio", explica Antonio Areche, otro de los vecinos de la zona que habita el lugar desde hace más de 25 años.
Y es que los habitantes de esta singular población, donde el paisaje volcánico recorre todo el horizonte junto a las numerosas viñas excavadas, siguen en la actualidad ingeniándoselas para producir su propia electricidad y mantener el agua potable. Un verdadero ejemplo de autogestión que en pocos lugares puede observarse, ya que el gasto también es sumamente elevado. "El gasto aproximado que tenemos mensualmente es de unos 800 euros para mantener el generador. Luego también están las baterías que cuestan cerca de 1.000 euros cada una y las vamos cambiando según se gastan o estropean", comenta Bruno, un gasto que también afecta a los ahorros de las Bodegas Antonio Suárez, donde la vecina Fayna Suárez explica cómo tienen que gastar cerca de 500 euros al mes para mantener la instalación de un motor que funciona con gasoil, un problema económico añadido dado los altos costes de los carburantes.
Tímida protesta
Pero lo más curioso de la zona es la escasa protesta que ha habido por parte de los vecinos frente a una situación que consideran injusta. "Preferimos esperar a que poco a poco vayan ofreciéndonos soluciones, como la reciente carretera y las canalizaciones que se hicieron. Pero es la primera vez que nos hablan de fechas concretas desde el Cabildo", comenta Hendriks, una opinión que contrasta con la de otra vecina, Pilar Suárez, que se queja del trato desigual de La Geria respecto a otros municipios: "A pocos kilómetros de aquí tienen luz, y nosotros pagamos la misma contribución", comenta Pilar Suárez, que lleva 20 años aprovechando la luz del día para poder planchar y utilizar algunos electrodomésticos, todos ellos preparados para posibles cortes de luz.
Sumario: "Ahora estamos esperanzados con la llegada de la electricidad, parece que para el mes de diciembre podrían empezar a colocar las instalaciones"
Incluso el propio programa televisivo "Caiga Quien Caiga" (CQC), se interesó por esta zona para lanzar un reportaje-denuncia de su situación, aunque por el momento sus vecinos han decidido esperar al desarrollo de los acontecimientos. "Ahora estamos esperanzados con la llegada de la electricidad, nos han prometido que para el mes de diciembre podrían empezar a colocarse las instalaciones", comentan desde la Bodega Suárez, donde se muestran esperanzados a la par que descontentos por la situación.
Por el momento, los habitantes tendrán que continuar su vida como lo han hecho ejemplarmente durante las últimas décadas. El bello paisaje es una de las recompensas para los vecinos de una de las zonas más singulares de la isla, donde la tierra volcánica y la vid crean auténticos tesoros vinícolas.
El artículo 47, una llave para la electricidad
Los problemas eléctricos de La Geria podrían tener solución el próximo otoño, ya que el Cabildo tratará de electrificar la zona amparándose en el artículo 47 de la Ley de texto refundido sobre el Régimen del Suelo y Ordenación Urbana, por el que podría suspenderse puntualmente el plan PIOT, principal obstáculo para que la luz llegue a la población.
Este plan podría suspenderse de manera puntual para este caso concreto, siempre que prosperaran las solicitudes que el Cabildo y el propio ayuntamiento de Yaiza van a realizar al Gobierno de Canarias.
"Hemos aprovechado la estancia en la isla del Consejo de Gobierno para solicitar la electrificación de La Geria. Creemos que si prosperan las peticiones del Cabildo y el ayuntamiento podríamos tener suspendido el PIOT hacia el mes de septiembre u octubre", declaró Leonardo Rodríguez, que se mostró esperanzado con solucionar el problema de la electricidad en la zona.
En la reunión estuvo presente el consejero de Política Territorial y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, que prometió defender en el gobierno la propuesta de suspensión puntual del PIOT, que ha sido realizada de acuerdo al artículo 47 de la Ley de texto refundido sobre sobre el Régimen del Suelo y Ordenación Urbana.
La alcaldesa de Yaiza Gladys Acuña logró arrancar, asimismo, el compromiso de la presidenta del Cabildo de Lanzarote, Manuela Armas, de "agilizar" cuantas medidas sean necesarias para que esta iniciativa sea realidad a la mayor brevedad posible. Un periodo de tiempo que, en cualquier caso, no excederá el final del presente año 2008, tal y como le aseguró el consejero del Ejecutivo Autónomo a la máxima responsable de la Corporación sureña.
