El debate electoral de TVE que enfrentó a Paulino Rivero (CC), Juan Fernando López Aguilar (PSC), José Manuel Soria (PP) y el invitado a última hora, Ignacio González (CCN) cosechó un share del 7,5 por ciento y una audiencia total estimada alrededor de las 50.000 personas. La cifra del share significa que durante la emisión del debate, sólo 7,5 de cada 100 personas que estaban viendo la tele en ese momento apostó por la confrontación política.
Y es que competir con una final española de la Copa de la UEFA es realmente una tarea imposible. La final entre el Español y el Sevilla, emitida por Antena 3, fue la indiscutible reina de la noche con puntas del 45,5 por ciento de share y aproximadamente 344.000 espectadores en la tanda de penaltis, ya cuando el debate electoral estaba más intenso y rozaba su fin.
De hecho, cuando terminaron los penaltis y empezaban las celebraciones, quedaban poco más de diez minutos de debate, pero debe ser complicado enchufarse a la discusión política después de 120 minutos de intenso fútbol y una tanda de penaltis donde se suele soltar mucha adrenalina.
Si el partido entre los equipos españoles no hubiese sido tan emocionante y se hubiese resuelto sin necesidad de prórroga, posiblemente la cifra del debate electoral hubiese sido mejor. Sin embargo, la apreciación es bastante optimista, porque a la misma hora del debate, no sólo se estaba viendo fútbol. No fue, pues, suficiente que los candidatos dedicasen parte de su tiempo a las listas de espera.