La inmensa mayoría de los 13 menores tutelados desaparecidos de un mismo centro de acogida en Arrecife, la capital de Lanzarote, eran niñas. Así lo confirman fuentes de la Unidad de Extranjería de la Policía Nacional a este medio. Un total de 12 niñas y un niño tutelados por el Gobierno de Canarias que habían llegado en patera a la isla desaparecieron de este centro entre mayo y noviembre de este año. La investigación aún se mantiene abierta para localizar su paradero.
En el marco de esta última causa que afecta a los centros de menores, la Policía Nacional ha detenido a un total de once personas, de las cuales nueve han sido arrestadas en Lanzarote.
Este caso es más alarmante en el caso de Lanzarote, ya que a diferencia de Gran Canaria o Tenerife, la isla solo cuenta con un centenar de menores en acogida, en ocho recursos de pequeño o mediano tamaño: seis de titularidad insular y dos del Gobierno de Canarias.
El viceconsejero de Bienestar Social del Gobierno de Canarias, Francisco Candil Corpo (CC), ha asegurado en declaraciones a este medio que "muchas veces puede ser una desaparición y en otras ocasiones sencillamente que el chico sigue su itinerario migratorio" y que, en ocasiones, en los países de origen "ya han pagado o se han comprometido a trasladarlo hasta otro lugar". Sin embargo, en esta operación, los agentes han desmantelado una red internacional dedicada a traficar con menores acogidos en Lanzarote y Gran Canaria y trasladarlos a Francia.
Entre otros puntos, la policía investiga delitos relacionados con pertenencia a organización criminal, falsedad documental, contra los derechos y deberes familiares, encubrimiento y pornografía infantil.
No trasciende la empresa responsable del centro
El consejero de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote, Marciano Acuña (CC), ha asegurado que desde la primera institución insular han colaborado con la Policía Nacional en el marco de esta operación, bautizada como Operación Tritón, como se conocía en la mitología Griega al hijo de Poseidón y Anfitrite, los reyes del mar. "Nosotros somos los que alertamos y estamos, junto con la entidad, colaborando con la Policía Nacional para llegar al fondo", ha añadido.
Ni la Consejería de Bienestar Social del Gobierno de Canarias ni el área correspondiente del Cabildo de Lanzarote han querido responder a las preguntas de La Voz sobre qué centro en concreto es en el que se han registrado los casos, quién es la empresa responsable y a que institución pública corresponde su contratación.
En este sentido, Francisco Candil ha añadido que, en cualquier caso, sea responsabilidad de una institución u otra. "Son menores tutelados y están en guarda de la comunidad autónoma", es decir, que en última instancia son responsabilidad de la comunidad autónoma.
"Somos los primeros interesados en que se esclarezca todo y que se llegue al fondo", ha mantenido el consejero insular de Bienestar Social, quien ha insistido en que conocer el nombre de la empresa o la institución responsable "no es de interés para nadie".
Mientras tanto, el consejero ha puntualizado que la empresa encargada de gestionar este centro de menores no está entre las entidades que están siendo investigadas en el marco de otras causas judiciales abiertas que implican de forma directa a los centros de acogida en Lanzarote y en el resto de Canarias.
Los menores no están bajo supervisión las 24 horas
El consejero ha añadido que los menores tutelados por el Gobierno de Canarias no están bajo un control estricto las 24 horas del día. "Cuando llevan un tiempo en el hogar, ya salen solos, van al cine, van a actividades, empiezan a tener una vida independientes. No es que hayan cometido un delito, son menores que están en régimen de protección", ha añadido.
Mientras tanto, sobre la necesidad de hacer autocrítica a raíz de los diferentes casos judiciales que se han abierto en Canarias que afectan a los centros de menores, Acuña ha respondido que están en "autocrítica permanente" y que cuando llegaron a controlar el Cabildo solo existía el centro de acogida de La Santa, de gran tamaño y prefirieron apostar por "un modelo más pequeño, más dimensionado".
Sin embargo, ha reconocido que estos modelos pequeños, como en el caso de la Casa del Marino de Arrecife o el centro de San Bartolomé también han dado problemas.
Desde el Gobierno de Canarias, Francisco Candil ha insistido en que "siempre va a haber gente sin escrúpulos" y ha descartado hacer autocrítica sobre cómo la gestión de los centros de menores pudiera estar influyendo en los problemas de seguridad para los menores. "Nosotros estamos permanentemente formando a nuestro personal para que haya detección, intentando mejorar situaciones y protocolos. La realidad es que vivimos en un mundo donde los mostruos existen. Para los niños que están en protección en la comunidad autónoma y para los que están en familias normalizadas", ha insistido.
"Puede haber detrás mafias, gente sin escrúpulos, yo decía ayer que sinvergüenzas y crápulas los ha habido siempre", ha continuado Candil, quien ha señalado que las mafias se aprovechan de personas "especialmente vulnerables".
Así pues, para finalizar el consejero ha asegurado que los menores "guiados por un sueño de mejorar sus circunstancias económicas y las de su familia, no son conscientes que se están exponiendo a estos personajes, estos golfos, que usándolos y habiendo situaciones de trata". En última instancia, el Gobierno canario, como responsables de su guardia y custodia, son los responsables de su bienestar.
