"La previsión es que el número de chicos que continúan jugándose la vida a bordo de un cayuco o de una patera para lograr una vida mejor para ellos y sus familias siga incrementándose, especialmente durante los próximos meses con la mejora de las condiciones del mar". Es la advertencia que ha puesto sobre la mesa la consejera de Bienestar Social, Juventud y Vivienda del Gobierno de Canarias, Inés Rojas. En estos dos primeros meses, un centenar han llegado a las costas canarias y los centros de acogida superan los mil adolescentes, de los que 33 residen en Lanzarote en dos casas de 30 plazas.
El consejero de Inmigración de la Primera Institución, Joaquín Caraballo, reconoce que es habitual estar por encima de la capacidad y que han llegado a "forzar" hasta cuarenta menores, pese a que el número de plazas está limitado por la Comunidad: dos centros para 12 y para 18 chicos. Además, explica que cuando son "demasiado pequeños" o "mujeres" son trasladados directamente a la península, ya que "los recursos no están preparados" ni para ser mixtos ni para mezclar a adolescentes con niños.
Desde el verano de 2006, cuando en sólo tres meses aumentó en 500 el número de menores inmigrantes en el archipiélago hasta llegar a los 800, el Gobierno central se comprometió a trasladar a un grupo de menores hasta otras comunidades autónomas, con el fin de que los centros de Canarias no acogieran a más de 300. Entonces se trasladó a 407 chicos, con pérdida de tutela por parte del Ejecutivo autonómico.
Siguiendo esta misma fórmula se ha llevado a la península a 120 chicos más. El resto permanece en el archipiélago, 280 en centros dependientes de los Cabildos y 672 en casas gestionadas por los dispositivos de emergencia para la atención de menores extranjeros no acompañados (DEAMENAC) ubicados en Tenerife y Gran Canaria.
Desde el Gobierno de Canarias reprochan que "mientras esta situación continúa agravándose, el Estado no ha hecho ningún gesto para colaborar con las Islas". En tres años el número de menores extranjeros en centros del archipiélago se ha multiplicado por cinco, pasando de más de 200 en 2005 a 1073 que actualmente residen en los centros de acogida de Canarias. El año pasado disminuyó la cifra, pero durante estos dos primeros meses ya han llegado 102 chicos procedentes de África y se prevé que vaya en aumento.
