La semana pasada, se detectaron destrozos en la tubería de impulsión ubicada en la carretera de circunvalación, en las inmediaciones de la gasolinera Shell. Lo mismo ocurrió con la arqueta que se encuentra en el depósito de la Vega de San José de la Villa de Teguise. Son actuaciones reiteradas que han hecho que el consejero delegado de Inalsa, Mario Pérez, acuda a la Justicia.
Mario Pérez considera que estos actos "intencionados" suponen un "atentado contra un bien público" y cree que "quienes actúan de este modo están impidiendo que Inalsa desarrolle su labor". Para el delegado de Inalsa existe una "responsabilidad criminal".
Las denuncias se interpusieron ante la Policía Local de Teguise con el objeto de esclarecer los hechos, aunque se desconoce a los responsables. Tras estas medidas, Mario Pérez ha vuelto a referirse a la necesidad de "civismo y respeto hacia los demás para lograr que estos hechos, que causan un serio perjuicio a la sociedad, no se vuelvan a repetir".