El presidente del club los Charcos de Windsurf, Daniel Martín, ha querido expresar su "indignación" y la del resto de colectivos que practican deportes al aire libre en la isla por las medidas adoptadas en la fase 1 de la desescalada, que fueron aprobadas por el Gobierno central. "Es inaudito que se nos multe por ir a Famara a coger olas mientras a nuestros compañeros de trabajo se les permite ir desde cualquier punto de la isla a El Charco a tomar unas cervezas a una terraza", cuestiona en un escrito.
En esa carta que ha remitido a La Voz, y que está dirigida a todos los partidos políticos, Daniel Martín afirma que recoge el sentir de muchos deportistas aficionados, que comparten un "profundo malestar" y un "absoluto rechazo" por las limitaciones que siguen teniendo, mientras sí se permiten otras actividades.
"No entendemos y nos indigna bastante, si realmente lo que se quiere es evitar el contagio y contener la expansión del Covid-19, el hecho de que no podamos realizar nuestros respectivos deportes, los cuales son todos deportes individuales y al aire libre, y sin embargo podamos reunirnos hasta 10 personas en una terraza por un tiempo ilimitado", cuestiona, explicando que su club ha estado en contacto en la última semana con "numerosos deportistas de Lanzarote y de otras islas", incluyendo surferos, triatletas, runners, ciclistas, kiters, windsurferos, miembros del colectivo de body board y SUP, escladores, ala deltas y parapentistas, buceadores y nadadores, que afirma que comparten el mismo sentir.
Los horarios, con "riesgo bastante alto"
"No entendemos cómo se designaron los horarios de 6 a 10 y de 20 a 23 para hacer deporte, ya que la mitad de este horario es de noche, lo cual, conlleva un riesgo bastante alto, sobre todo para todos los deportes de mar como el windsurf , el kite y el surf, o para deportes de carretera como el ciclismo, por no hablar del ala delta y el parapente", añade.
Además, también reivindica que se permita utilizar el coche para poder desplazarse a otros municipios a realizar estos deportes, dado que actualmente sigue sin estar autorizado para deportistas no federados. De hecho, eso motivo que el pasado martes fueran denunciados hasta nueve surfistas, dentro de un dispositivo desplegado por la Guardia Civil en Famara para hacer cumplir el estado de alarma. Y es que aunque se encontraban dentro del horario permitido para practicar deporte, para llegar hasta la zona habían hecho uso de sus vehículos, que es lo que sigue sin estar autorizado.
"Esperamos tengan en cuenta, a la máxima urgencia posible, todas nuestras reivindicaciones y tengan a bien modificar los horarios para hacer deporte individual al aire libre", reclama en su escrito el presidente de este club de windsurf.
Junto a su queja, La Voz ha recibido en los últimos días las de muchos otros deportistas, incluyendo las de personas que practican surf y que se vieron sorprendidas por el dispositivo de vigilancia desplegado el martes en Famara. "Me puedo desplazar en coche al mismo sitio para ir a los bares", cuestionaba uno de ellos, que se preguntaba "cuál sería el riesgo de hacer surf en comparación a comer papas y tomar alcohol en un bar con muchas más gente alrededor".
