Más de 200 profesionales se han inscrito en el seminario "Intervención en situaciones de abuso sexual a menores", unas jornadas de formación gratuitas desarrolladas por la Dirección General de Protección a la Infancia y la Familia del Gobierno de Canarias celebradas este viernes en Lanzarote.
La responsable del área, Carmen Morales, destacó la necesidad de seguir avanzando en la mejora de la detección de casos de violencia sexual hacia menores, para lo que señaló que es clave que los especialistas cuenten con todas las herramientas necesarias. "Los expertos estiman que alrededor de un 20% de la población puede haber sufrido abusos sexuales en la infancia. No se puede afirmar que haya más casos hoy que en el pasado, pero sí han evolucionado los procedimientos para detectarlos y prevenirlos. Debemos seguir en ese camino", subrayó.
"La detección de un posible caso de violencia sexual contra menores es algo complejo y requiere de un alto grado de conocimiento del fenómeno. Debemos partir de la base de que la mayoría de los niños y niñas que están siendo víctimas de violencia sexual no se lo cuentan a nadie", añadió la directora en las jornadas, que también se han han celebrado en Gran Canaria, Tenerife y Fuerteventura desde que empezó el año.
Un 15% de los niños y un 23% de las niñas han sido víctimas alguna vez
Morales insistió en la necesidad de reforzar la formación para que los profesionales tengan cada vez más armas para la detección de situaciones de este tipo, ya que aunque "no hay estadísticas, los estudios realizados por expertos estiman que un 15% de los niños y un 23% de las niñas han sido víctimas alguna vez en su vida".
Desde el Gobierno de Canarias apuntan que "la mayor parte de los actos de violencia sexual son cometidos por miembros de la propia familia o personas muy allegadas a los menores". y destacan que "el 20% de los casos los realizan menores de edad y casi el 50% de los agresores cometen su primer episodio de violencia sexual antes de los 16 años".
La jornada contó con la participación de Celia Nevado Fernández, psicóloga experta en Criminología y que lleva más de 11 trabajando en la detección del abuso sexual. El seminario se desarrolló en cinco apartados: conceptualización del fenómeno de la violencia sexual; indicadores de violencia sexual contra menores ; primeras actuaciones ante la sospecha de Violencia Sexual contra Menores; qué es la victimización secundaria y cómo evitarla, y el programa de atención a menores víctimas de violencia sexual y sus familias de Canarias.
Oficina de atención a víctimas de violencia sexual
El equipo de la consejera Cristina Valido afirma que nada más llegar a la Consejería de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda en 2017, en junio de ese año puso en marcha la primera oficina de atención atención a niños y niñas víctimas de violencia sexual y sus familias. Hoy hay ya una en Tenerife y otra en Gran Canaria, compuestos por dos psicólogas, una trabajadora social y un administrativo, cada uno, bajo la supervisión de la dirección del Programa de Evaluación, Diagnóstico y Tratamiento de menores que sufren violencia sexual, de la Fundación Márgenes y Vínculos.
El objetivo de esta oficina es proporcionar un tratamiento terapéutico integrado a los menores víctimas de violencia de género y sus familias en coordinación con la Dirección General de Protección a la Infancia y la Familia. Actualmente se está trabajando con cincuenta menores y su entorno, entre las dos provincias.
Relaciones familiares
Desde el Ejecutivo regional señalan que "casi todos los especialistas consideran que en la mayoría de los casos de violencia sexual contra menores, el agresor y la víctima se conocen, y muchas veces por el tipo de relación, la víctima confiaba en su agresor".
"También se ha comprobado que el empleo de la relación de superioridad del agresor sobre la víctima es mucho más frecuente que el de la violencia física, sobre todo en casos de víctimas menores", añaden desde el Gobierno de Canarias, desde donde indican que "las estrategias utilizadas por el abusador son principalmente la confianza y la familiaridad, unidas al engaño, la sorpresa o los regalos."
Nuevas formas de victimización a través de las tecnologías
Asimismo, explican que con la evolución de las tecnologías han emergido formas novedosas de violencia sexual que se sirven del anonimato, facilidad para el engaño y para acceder a menores, así como el atractivo que ofrecen estos medios tecnológicos.
Así, se dan casos de sexting, que es la difusión incontrolada de mensajes, fotos o vídeos de contenido sexual entre menores a través de las TIC; y de grooming, que es un acoso ejercido por un adulto y se refiere a las acciones realizadas deliberadamente con el fin de establecer una relación y un control emocional sobre un menor el fin de preparar el terreno para el abuso sexual del menor. Por último, también se dan casos de ciberbullying, acoso entre iguales a través de la red, que puede ser en ocasiones de tipo sexual.
En este sentido, el pasado martes se presentó la Guía para el buen uso de las nuevas tecnologías para orientar a las familias con "consejos eminentemente prácticos y que aborda mediante preguntas y respuestas cómo deber ser el acceso de sus hijos e hijas al universo de posibilidades que les ofrece el mundo digital", como indicó Morales.