La presidenta del Cabildo, María Dolores Corujo, ha manifestado su profunda satisfacción porque La Graciosa pase a la Fase 2 en el proceso de desescalada junto con las islas de La Gomera, El Hierro y Formentera.
Corujo ha señalado que en esta nueva fase se permitirá la atención en mesas en el interior de locales de restauración, garantizando la distancia de seguridad, y se permiten la caza y la pesca deportiva al tiempo que se flexibiliza la apertura de centros educativos, comerciales y de culto.
"Lo verdaderamente importante es que seguimos dando pasos firmes. Nuestra principal preocupación siempre ha sido el que se produzcan rebrotes que nos hagan retroceder y, hasta el momento, hemos conseguido evitar ese riesgo", ha explicado.
La máxima responsable insular ha manifestado su convencimiento de que Lanzarote seguirá muy pronto los pasos de La Graciosa: "Estamos haciéndolo bien. La gente está actuando con responsabilidad en este nuevo escenario y desde las instituciones nos estamos volcando en mantener los niveles de protección adecuados. Ahora, llega la hora de recoger los frutos de ese esfuerzo colectivo".