Fotos: Sergio Betancort
Un año más la montaña de Teguise se convirtió en lugar de peregrinación por los cientos de devotos que desde diferentes lugares de la isla subieron hasta la montaña. Unos caminado desde madrugada y otros lo hicieron en coche, todos con un mismo propósito, llegar junto a los pies de Nuestra Señora de Las Nieves. Para aquellos que lo hicieron caminando la climatología estuvo a su favor porque la espesa y refrescante neblina que cubría el camino lo hacía mucho más llevadero. Además por primera vez, el Consistorio puso dos puestos de avituallamiento donde se les ofrecía a los peregrinos, trozos de sandía fresca, higos picones, melón, uvas y agua. Además, a la llegada a la ermita un buen vaso de chocolate y galletas.
En un día tan especial desde la parroquia de Teguise se programaron la celebración de dos misas de Peregrinos a las 8´00 y 10´00 de la mañana dejando para las 12´00 del mediodía la Solemne Eucaristía en honor a Nuestra Señora de Las Nieves. Celebración que estuvo presidida por Agustín Lasso, párroco de Tías asistido por Sixto Álvarez, párroco de Yaiza y Arcipreste de Lanzarote, Rafael Tejera párroco de San Bartolomé y Juan Antonio Ártiles titular de Teguise. La ermita en todo momento fue un auténtico río de peregrinos llegando en algunos momentos hacerse muy difícil acceder al interior de la misma.
Finalizada la Santa Misa se procedió a la procesión, encabezando la misma la banda municipal de Teguise seguida de la imagen de Nuestra Señora de Las Nieves, los sacerdotes oficiantes, autoridades y feligreses haciendo el recorrido de costumbre por los aledaños cercanos a la ermita. Durante el recorrido procesional no faltaron los Vivas a la Virgen así como una gran ovación tanto a la salida como al término de la misma.
Luego por la tarde a las 18´30 horas se celebró la Eucaristía en memoria de todos aquellos difuntos que fueron devotos de Nuestra Señora de las Nieves.