Cerca de 20 niños participaron en el campamento de la Asociación de Diabéticos de Lanzarote (Adila), que se celebró en la Residencia Escolar de Haría, desde el 27 de junio al 2 de julio.
Este campamento tuvo lugar gracias a la colaboración de la Gerencia de Servicios Sanitarios del Servicio Canario de Salud de Lanzarote, que facilitó el equipo sanitario formado por un médico, un enfermero y una enfermera educadora en diabetes. Se contó con el apoyo de tres monitores de Adila y el de una empresa de animación.
El grupo estuvo formado por 18 niños, de entre 5 y 14 años, siete de los cuales se desplazaron desde la isla de Fuerteventura, alternando durante estos días las actividades lúdicas y talleres sanitarios específicos.
La importancia de celebrar estos campamentos, señalan desde Adila, radica en que los niños "aprenden a vivir con la diabetes y no para la diabetes", pudiendo asistir a un campamento de verano, como tantos otros niños de su edad en esta época, "sin sentirse diferente"s. Además, tienen la oportunidad de asistir a talleres sanitarios donde se les acerca de forma amena a conocimientos sobre cómo llevar un buen autocontrol, alimentación sana, cómo calcular las raciones de hidratos de carbono, cómo inyectarse correctamente la insulina, etc.
