Un total de 6.007 personas murieron en 2023 intentando llegar a Canarias en pateras o cayucos, una media de 16 cada día, una cifra sin precedentes que triplica los registros del año anterior, cuando perecieron en la misma ruta 1.784 migrantes
Es el balance que hace el colectivo Caminando Fronteras en la nueva edición de su informe Monitoreo Derecho a la Vida, presentado este martes en Madrid, que sitúa al 2023 como el año "más mortífero" desde que la organización recopila registros, en 2007, con 6.618 víctimas en las rutas marítimas con destino a España.
Entre las personas que perdieron la vida en las rutas de acceso a España a lo largo del año que acaba de terminar había 363 mujeres y 384 niños y niñas.
Del total de fallecidos, nueve de cada diez, 6.007, murieron en la ruta atlántica hasta Canarias, mientras que 434 personas perdieron la vida en la ruta argelina del Mediterráneo occidental; 147 migrantes, en el Estrecho de Gibraltar y 30, en la ruta de Alborán.