El sindicato FSP-UGT ha denunciado la "gravísima situación" sanitaria que se está viviendo en el Centro Penitenciario de Tahíche, donde aseguran que llevan una semana sin médico. Según sostiene el sindicato, la relación de puestos de trabajo de la prisión contempla que debería haber cinco médicos facultativos en esta cárcel, pero en realidad llevaban tres años "con un solo médico para atender a una población de 500 internos", pese a que se trata de "una población especialmente sensible por las diversas y graves patologías que suelen darse, muchas de ellas infectontagiosas o psiquiátricas".
Ahora, denuncian además que "esta situación se ha agravado especialmente en la última semana, debido a la ausencia del único médico, lo cual ha dejado al centro penitencario sin asistencia facultativa".
Según el sindicato, esto "ha provocado que las labores habituales del facultativo se estén trasladando al servicio de urgencias del Hospital General Doctor José Molina Orosa, con la consiguiente sobrecarga del servicio público de urgencias y los trastornos a los ciudadanos enfermos".
Además, advierten de que "los traslados de los internos al hospital general un alto costo en transporte y custodia de las FSE, todo ello por la política de recortes de la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias", a la que acusan de no haber cubierto esas 5 plazas vacantes de médico facultativo en la prisión de Tahíche.
"Situaciones de peligro para trabajadores e internos"
Desde el sindicato señalan además que la falta de médico está provocando también "situaciones de peligro en los trabajadores del centro, así como desprotección en sus obligaciones reglamentarias, ya que para muchas de las actuaciones regimentales diarias es imprescindible el informe del médico del centro penitenciario", que también debe encargarse de "la redacción y control de los protocolos ante enfermedades infectocontagiosas".
Ante esta situación, acusan a Instituciones Penitenciarias de estar dejando "desprotegidos a los internos y a los trabajadores ante cualquier brote de enfermedades como tuberculosis, parásitos o hepatitis".
Por todo ello, exigen que se contrate "de manera inmediata los médicos necesarios para atender adecuadamente a los internos, según ordena la normativa vigente, evitando así la sobrecarga de los servicios públicos de urgencias, con asistencia médica a internos cuyos procesos no son urgentes, con el consiguiente perjuicio al resto de los usuarios".