El Cabildo de Lanzarote ha tenido que hacer frente a una sanción de 4.000 euros por una infracción "grave" detectada en el matadero insular. Los hechos fueron denunciados por un inspector de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, después de realizar una visita a las instalaciones.
Aunque esa visita tuvo lugar en abril de 2016, el expediente sancionador no se inició hasta más de un año después, en agosto de 2017, cuando el director del Servicio Canario de Salud firmó una resolución ordenando su apertura. Finalmente, concluido ese expediente, Salud Pública impuso esa multa al Cabildo, que hasta el pasado mes de julio no había sido abonada.
Fue el pasado 31 de julio cuando el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, firmó un decreto aprobando el pago de esa sanción, aunque un mes después tuvo que dictar otro, ya que se había cometido un error en la redacción del texto del decreto y tuvo que corregirlo. Con ese segundo decreto, se autorizaba y reconocía la obligación de pago y se ordenaba abonar los 4.000 euros al Servicio Canario de la Salud "en concepto de la infracción grave a la normativa sanitaria vigente".
Lo que no se detalla en el decreto es cuál fue concretamente la infracción detectada por el inspector, que quedó reflejada en el acta que levantó tras su visita al matadero. La Voz de Lanzarote se ha puesto en contacto con el área de Salud Pública para conocer los detalles de ese expediente, pero desde este departamento del Gobierno canario han respondido que las resoluciones son "confidenciales" y que solo informan del contenido de los expedientes y las sanciones a las partes, incluso aunque se trate, como en este caso, de una administración pública.