El Gobierno de Canarias ya ha sacado a licitación las obras de la primera fase de la Unidad de Oncología Radioterápica del Hospital Molina Orosa por 2.220.676 euros. El plazo de ejecución de los trabajos será de doce meses y la Consejería de Sanidad afirma que se inicarán en el primer trimestre de 2020 si el procedimiento de contratación se completa dentro de los plazos habituales.
Según se recoge en el anuncio de licitación, que se publicó el pasado 5 de diciembre, las empresas interesadas tendrán hasta el próximo 8 de enero para presentar sus ofertas. Dicho proyecto se encuentra cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en un 85%.
"En los últimos meses hemos dado un impulso considerable a esa unidad que necesita Lanzarote, trabajando sin vender humo" , ha señalado la consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Teresa Cruz Oval, apuntando que en 2019 se han diagnosticado 586 casos de cáncer y y "una franja, de entre 291 y 350, que requieren traslados al Hospital Doctor Negrín de Las Palmas de Gran Canaria para recibir radioterapia".
Destinada exclusivamente "para aquellos casos que no corren peligro"
En ese sentido, la consejera de Sanidad ha matizado que "este servicio estará destinado exclusivamente para aquellos casos que no corren peligro" mientras que, para aquellos pacientes que requieran de una intervención, el Hospital Doctor Negrín continuará siendo su centro de referencia, ya que "estamos hablando de una cuestión de seguridad, no de comodidad". "En las isla no capitalinas hay que conjugar el recibir tratamiento lo más cerca posible con el elemento de la seguridad asistencial", ha añadido.
La Unidad de Oncología Radioterápica de Lanzarote se construirá junto a las dependencias administrativas de la Gerencia de Servicios Sanitarios y contempla un búnker dotado de áreas de apoyo técnico y de uso del personal, dos consultas, salas de espera y área administrativa, que ocuparán una superficie útil de 400 metros cuadrados, de un espacio total construido de 538 metros cuadrados.
Según se indica en el proyecto de ejecución, la primera fase define la demolición del actual salón de actos para la construcción posterior del búnker y sus anexos, así como una reforma interior de parte de los despachos de gerencia del hospital.
