El secretario general de Podemos en Lanzarote, Carlos Meca, tacha de "broma macabra" el programa de bienestar para camareras de piso presentado este martes por la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan), por el que se pretende "transformar el esfuerzo de las camareras de piso en entrenamiento". Meca afirma que ese programa parece una "burla" hacia un colectivo "extenuado por la sobrecarga de trabajo y necesitado de calidad y salud".
"Lo que necesitan las camareras de piso es trabajar en mejores condiciones, es decir, que no se les explote laboralmente. No tiene sentido que se les enseñe posturas o movimientos adecuados, que las trabajadoras ya conocen, y al mismo tiempo se les exija limpiar una cantidad desmesurada de habitaciones. Necesitan que su carga de trabajo se reduzca hoy mismo", señala Meca.
Según Podemos, es "increíble" comprobar cómo Asolan, que sigue negando la situación de explotación de las camareras de piso, está tan alejado de la realidad diaria de las camareras de piso en Lanzarote, que sí sufren de múltiples dolencias y cansancio crónico pero debido exclusivamente a las durísimas condiciones laborales que les imponen las empresas, contratas y subcontratas, "que las mantienen en estado de precariedad, eventualidad y sobrecarga de trabajo inimaginable".
"Su situación no se debe a la falta de entrenamiento, sino a la extenuación"
"Sabemos que muchas trabajadoras acaban su jornada laboral rendidas y que luego no pueden disfrutar del resto del día por el mal estado en que se encuentran, teniendo que descansar durante la mayor parte del tiempo para luego comenzar otra jornada agotadora, y recurriendo en muchas ocasiones a los medicamentos para poder mantener el ritmo. Esta situación tan lamentable no se debe a la falta de entrenamiento sino a la extenuación".
Desde Podemos recuerdan que la ocupación alojativa turística media en Lanzarote subió de 87,10% en todo el año 2015 a 89,61% en el año 2016, con repuntes en verano pasado por encima del 93%. También señalan que esta ocupación "no ha parado de aumentar en los últimos años con los correspondientes beneficios para los empresarios turísticos, pero sin traslación real a las trabajadoras".