La moción de Podemos que pedía la rescisión del contrato de patrocinio de la SPEL con la empresa Marina Rubicón ha sido rechazada en el pleno. El grupo de gobierno, formado por CC, PSOE y PIL, ha contado con el apoyo del PP para votar en contra; mientras que NC se ha abstenido. El presidente ha justificado el voto del equipo de gobierno alegando que no tomará ninguna medida "hasta que el juzgado anule la licencia del puerto deportivo", a pesar de que el exalcalde de Yaiza reconociera que fue sobornado por los propietarios del mismo.
Durante el pleno también se debatió, señalan desde Podemos, sobre las reclamaciones presentadas al presupuesto del Cabildo por trabajadores del Hospital Insular. Éstos siguen esperando que el grupo de gobierno salde las deudas en relación a las pagas y planes de incentivo de la plantilla, que se recogen en el acuerdo. Tanto el presidente como el consejero de Hacienda afirmaron que "no podían ejecutar esos acuerdos ya que no tienen todos los informes favorables para poder hacer los pagos pendientes".
"Cuando los beneficiarios son sus amigos de las agencias de viajes o sus abogados amigos, en el listado de facturas se incluía una de Ignacio Calatayud por importe de 3.500 euros, siempre encuentran la forma de pagarles aunque no cumplan la ley, pero cuando se trata de pagar lo que se les debe a los trabajadores del Hospital Insular, entonces se vuelven más legalistas que nadie", comentó Carlos Meca, portavoz de Podemos. Igualmente, recordó "el pago de 800.000 euros de facturas que incumplieron el procedimiento de contratación y que serán abonadas a través de un procedimiento extraordinario como es el reconocimiento extrajudicial de deuda".
El grupo de gobierno ha rechazado también la moción de Podemos en la que pedía al Cabildo que encargara un estudio exhaustivo sobre la situación sanitaria en Lanzarote. Al respecto, el presidente ha asegurado que "el estudio debería hacerlo el Gobierno de Canarias y no el Cabildo".
Por último. desde Podemos señalan que "la polémica también se suscitó con las declaraciones del consejero del PIL, Manolo Cabrera, que aseguró que era normal que un afiliado de Coalición Canaria como Juan Francisco Rosa presionara a los políticos para intentar legalizar su bodega"."Algunos empresarios presionan de manera comprensible, pidiendo citas con los responsables públicos para exponerles su caso, mientras otros, y ahora ya lo sabemos, presionan poniendo maletines sobre la mesa, como pasó en Marina Rubicón y en los hoteles ilegales de Playa Blanca", afirmó el portavoz de Podemos.
