Las discrepancias entre el alcalde de Arrecife, Enrique Pérez Parrilla, y el concejal de Urbanismo, Antonio Hernández, con respecto a la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana de Arrecife ha obligado a los dos partidos, PIL y PSOE, a ceder en sus planteamientos y buscar un camino común. Tras una reunión que mantuvieron a última hora del lunes, han pactado abrir un "periodo de reflexión y consulta de cara a fijar su posición definitiva con respecto al polémico Plan".
El primer paso ha sido retirar la revocación de la aprobación inicial del Plan del orden del día previsto en la Comisión de Urbanismo que se celebra este martes. Ahora, PIL y PSOE se han comprometido a "aprobar definitivamente un plan que responda a los intereses generales de la población de Arrecife".
Las dos fuerzas políticas achacan la polémica del documento al anterior grupo de Gobierno, liderado por María Isabel Déniz, ya que lo sacó adelante "sin consenso previo", lo que "ha generado una situación de enorme complejidad técnica y jurídica, a la que ambos partidos han tenido que dar respuesta".
El acuerdo que firmaron PIL y PSOE este lunes por la tarde, se produce el mismo día en que las asociaciones de empresarios manifestaron públicamente su apoyo al actual documento y solicitaron que se continuara con la tramitación hacia la aprobación provisional. Por su parte, Antonio Hernández insistía hasta este mismo lunes en mantener el documento y llevar a cabo las modificaciones sustanciales, sin necesidad de retirar el Plan, aún habiendo fijado una fecha para celebrar el Pleno en el que se pretendía revocar la aprobación inicial, según anunció Enrique Pérez Parrilla.
