Padres, alumnos y profesores del CEIP La Destila se han concentrado en la mañana de este miércoles en el patio del colegio, en reclamo de un nuevo centro. Con una cacerolada y con pancartas que rezaban "Colegio nuevo ya" o "Es importante, lo necesitamos", solicitaban que se inicien de una vez las obras que tanto tiempo llevan esperando.
De hecho, no es la primera vez que la comunidad educativa de este centro se manifiesta para reclamar el nuevo colegio. Ya en febrero, padres, alumnos y profesores denunciaron las deficiencias que presenta el colegio, con humedades, ventanas rotas y cascotes del techo que se caen, entre otros desperfectos.
Unas deficiencias que continúan presentes, a pesar de que el Ayuntamiento ha realizado alguna intervención en el centro, como es el caso de la instalación de bajantes para que el agua no se acumule en el techo y evitar así las humedades, según afirma la directora del colegio, Eva Ramírez.
Sin embargo, esto no parece suficiente y, de hecho, añade Eva Ramírez, "hay una grupo que lleva más de 10 días dando clase en la biblioteca, porque las humedades hicieron que cayeran cascotes del techo".
"Esto es una batalla interminable. No sé puede estar así. Los niños se merecen una educación digna y tienen el mismo derecho que los niños de otros centros que se encuentran en perfectas condiciones", manifiesta la directora.
Una autorización que no llega
El problema de la demora en la construcción del nuevo centro radica en las viviendas que se encuentran anexas al colegio. Unas casas que en su día fueron construidas para profesores, pero en las que hoy, a excepción de en una de ellas, residen okupas.
El Ayuntamiento inició en octubre del año pasado el expediente de desahucio de esas viviendas después de que el Gobierno de Canarias así lo exigiese, con el fin de derribarlas y construir un nuevo colegio sobre los mismos terrenos.
Sin embargo, según explica el alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, se necesita la autorización del Ministerio de Educación para cambiar el registro de titularidad del centro a nombre del Consistorio. Y, mientras esa autorización no llegue, no se puede proceder al desahucio y, por lo tanto, a la construcción del nuevo centro.