Aseguran que "esto no ha hecho más que empezar" y piden que PIL y PSOE paralice ya el Plan General tal como les prometieron antes de las elecciones

Los vecinos de Morro Angelito y otros barrios, vuelven a la calle

Pasquines, sábanas sobre las que se podía leer "Suspensión del Plan ya", pitos y vecinos enfadados, volvieron a tomar la céntrica calle Real y el Ayuntamiento de Arrecife el pasado sábado por la mañana. ...

8 de octubre de 2007 (09:10 CET)
Los vecinos de Morro Angelito y otros barrios, vuelven a la calle
Los vecinos de Morro Angelito y otros barrios, vuelven a la calle

Pasquines, sábanas sobre las que se podía leer "Suspensión del Plan ya", pitos y vecinos enfadados, volvieron a tomar la céntrica calle Real y el Ayuntamiento de Arrecife el pasado sábado por la mañana. Son los vecinos del barrio capitalino de Morro Angelito y de otras barriadas, que han decidido iniciar nuevamente movilizaciones para exigir al grupo de Gobierno que paralice, tal como les prometió antes de las elecciones, el Plan General de Arrecife.

Desde las 11:00 de la mañana recorrieron la calle Real para entrar, pasadas las 12:00 del mediodía en el Ayuntamiento de la capital, donde permanecieron casi una hora a la espera de que algún miembro de la Corporación municipal acudiera a escuchar sus reivindicaciones. "Finalmente desistimos porque allí, no llegó nadie" explica Joaquín García, vecino del barrio de Titerroy, "echamos de menos el sábado a Antonio Hernández", cuenta este manifestante, quien recuerda que en su momento el presidente del PIL les ofreció un coche con megafonía para hacerse oír por las calles de Arrecife, "pero claro, ahora no estamos en campaña" apuntilla Joaquín García.

Los manifestantes pedían que el grupo de Gobierno municipal cumpla con lo que prometió antes de alcanzar la alcaldía: "paralizar el plan, eso es lo que queremos", afirmaban los manifestantes, y si no lo hacen, apostilla Joaquín García, "Antonio Hernández, váyase a su casa".

Los vecinos están dispuestos a seguir manifestándose hasta que consigan que el Plan sea paralizado. "Esto no ha hecho más que empezar, estamos calentando motores" concluye el vecino de Titerroy.

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