El último detonante de la polémica ha sido la decisión del Cabildo de encargarse directamente de la gestión de la central única de taxis para la coordinación del sistema Auriga, convocando un concurso para subcontratar a una empresa ante la falta de acuerdo de los profesionales.
"Creemos que la forma de integrar a los taxistas en la central única, no ha sido la más correcta por parte del Cabildo y los Ayuntamientos, modificando para ello las ordenanzas municipales, sin dar audiencia previa a las asociaciones, sin escucharlas, y sin aceptar las alegaciones presentadas por las mismas, sobre todo en el caso de San Bartolomé", subrayan desde la asociación.
En este sentido, señalan que "la manera más correcta de llevar a cabo esta integración,hubiera sido convocando en la misma mesa de reunión, a las diferentes asociaciones junto a las autoridades públicas, y llegar a un acuerdo y un consenso común entre todos. Y no imponernos el sistema por obligación y a la fuerza. Creando con ello un gran agravio y malestar en el gremio hacia los gobernantes".
Aunque el sistema debería haber estado en funcionamiento desde hace meses, los taxistas consideran que aún hubiera hecho falta más tiempo. "El Cabildo debe entender que la gestión de esta central es una circunstancia nueva y compleja para el sector, y que necesitamos el tiempo preciso para establecer las pautas y los organismos necesarios, para organizarnos y coordinarnos entre nosotros y conseguir una buena gestión de la central, que satisfaga tanto a los usuarios como a los propios taxistas", afirman.
Ahora, aseguran además que "tras varias reuniones celebradas entre las diferentes asociaciones de taxistas de la Isla", por fin habrían llegado "a un acuerdo final para la organización y gestión de la central Auriga, acuerdo que se le ha transmitido al consejero de Transportes por escrito, y que esperamos que lo analice detenidamente y acepte posteriormente".
Asimismo, piden que el Cabildo subvencione tambiénlos aparatos que se deben instalar en los taxis, "ya que son bastante caros, y sobre todo porque nosotros tenemos un sistema de radio-taxi muy eficaz y en pleno funcionamiento, que nos ha costado una gran inversión, y que ahora tendremos que desecharlo para instalar el nuevo sistema que nos ha sido impuesto por obligación, y que opinamos que no va a mejorar en gran medida, la eficacia del que tenemos actualmente en nuestro municipio".
"AMENAZAS"
Respecto al papel que está jugando el consejero de Transportes, consideran que "se está excediendo en sus funciones, ya que está continuamente amenazando en público a los taxistas, declarando que les va retirar las licencias a aquellos propietarios de taxis que no instalen los equipos en sus vehículos".
Incluso, llegan a afirmar que en los últimos tiempos "está llevando a cabo una política de acoso y derribo hacia el sector del taxi, enviando a los inspectores de transportes del Cabildo, a paralizar e inspeccionar a los taxis del aeropuerto, en los dos últimos jueves de este mes. Entorpeciendo nuestro trabajo, y haciéndonos perder el tiempo en la prestación de nuestros servicios, con los clientes dentro del taxi y en las horas de más demanda de taxis por los usuarios. Provocando con ello que los turistas y visitantes de nuestra Isla deban esperar más tiempo para coger un taxi".
Por todo ello, desde esta Asociación de taxistas anuncian que este miércoles tendrán una asamblea donde analizán la situación, y tomarán "las decisiones necesarias sobre el sistema Auriga y sobre las declaraciones y acciones que está llevando a cabo últimamente el consejero". Además, advierten que estudiarán la viabilidad de hacer un paro general en el sector y estudiarán pedir la dimisión de consejero de Transportes del Cabildo.