El personal docente de Canarias irá a la huelga el próximo día 2 de octubre, tal y como estaba anunciado por los sindicatos, pero esta medida no se mantendrá indefinidamente, como se había barajado en el sector antes del comienzo del presente curso escolar. Los maestros reclaman desde hace más de dos años acogerse a una homologación salarial con el resto del cuerpo de funcionarios de la Comunidad Autónoma, una posibilidad que el Ejecutivo sólo está dispuesto a negociar con contrapartidas en materia de calidad educativa.
El comité de huelga del profesorado adscrito a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias confirmó este miércoles en Las Palmas de Gran Canaria que el paro del sector se limitará, de momento, a la jornada del próximo día 2, por lo que queda descartada la opción de la huelga indefinida.
Sin embargo, los sindicatos representados en el comité de huelga aseguraron que en lo sucesivo podrían tomar "medidas más drásticas" tras consultarlas previamente con el colectivo del profesorado. Los profesores siguen considerando que el Gobierno se niega a negociar la homologación.
Por ello, seguirán con sus movilizaciones. "Cada quince días estaremos en la calle con actos que hagan visibles que el conflicto sigue abierto", señaló Adolfo Padrón, del comité de huelga. Así, mañana habrá concentraciones en las dos capitales canarias, a las 18.00 horas, además de la huelga del día 2.
Crisis
En cuanto al argumento de la crisis económica dado por la consejera de Educación del Gobierno de Canarias, para no conceder la homologación, el comité insistió en que "no hace falta presupuesto, sino voluntad para dialogar, negociar y llegar a un acuerdo".
Se trata, dijo Padrón, de "negociar los plazos necesarios para que la deuda pueda ser asumida por este Gobierno", a cuyo presidente pidió que abriera la mesa de negociación con los docentes, además de la dimisión de la consejera.
Asimismo, desde el comité se destacó que el curso se ha iniciado "con una triple vertiente abierta. Un conflicto laboral pendiente, un empeoramiento de las condiciones laborales de los docentes y un deterioro progresivo de la educación pública en Canarias".
Para María Dolores Guevara, del comité de huelga, el Gobierno de Canarias "vende medidas de calidad educativa no negociadas y sin un diagnóstico previo de necesidad" como la acogida temprana en los centros y las clases de refuerzo por la tarde.
"Estamos de acuerdo en esas dos medidas, pero deben ser consensuadas, nos negamos a la imposición de unas medidas populistas", declaran desde el comité.
