Operarios de limpieza han empezado este martes con las tareas de desinfección del parque Ramírez Cerdá, cubierto por una amplia capa de excrementos de garzas e incluso de aves muertas.
"La garza es un bichito protegido y tiene que tener todos los permisos y las bendiciones de Medio Ambiente. No es competencia del Ayuntamiento", declaraba este martes el alcalde en Radio Lanzarote. Según él, en estos momentos "hay menos garzas" en el Ramírez Cerdá, ya que se está trabajando en la erradicación de estas aves.
Sin embargo, el primer edil admitía que esta situación "no puede seguir indefinidamente así". "Ha habido una serie de inconvenientes y así está la cosa", explicaba el alcalde. Las [redes->http://www.lavozdelanzarote.com/spip.php?article19984] que tenían que haberse instalado todavía no han llegado y el parque permanece cerrado.
"Es verdad que es un parque que debe estar abierto para que los ciudadanos, que no tienen tantos espacios abiertos en Arrecife, puedan estar allí con sus hijos, y en eso estamos trabajando", indicaba Pérez Parrilla. A su juicio, los medios han magnificado la situación porque según él, "garzas hay bastante menos" y el parque "lleva oliendo mal muchos años".
En cuanto a las jaulas que se han instalado en una pequeña arboleda cercana al Cabildo, el alcalde señalaba que ya se ha iniciado el traslado de las aves con "ciertos resultados".