Unos camerinos abandonados, en pleno centro de Arrecife, que se han convertido en el hogar de varios indigentes. Ésa es la realidad que se puede encontrar en el parque Islas Canarias, que ha terminado convirtiéndose en tierra de nadie, mientras avanza su deterioro.
Emilio, Jesús y Ramón son tres de las personas que han hecho de este habitáculo un lugar donde vivir. "Pasamos por aquí, estaba la puerta abierta y decidimos entrar", cuenta Emilio. Así, rodeados de plásticos, cartones, botellas y demás deshechos, llevan viviendo desde hace unas dos semanas.
La crisis dejó sin trabajo a Emilio hace cinco años y desde entonces la calle se convirtió en su hogar. Tras haber estado dedicándose más de 25 años a la construcción, cobra una prestación por desempleo de 420 euros, queasegura que se le acaba "en quince días". "Hasta ahora me ha dado para todo el mes, para comprar comida y para fumar. Gracias a Dios vivo en la calle, pero estoy soltero, porque si tuviera un niño sería más complicado", explica Emilio.
En similar situación se encuentra Jesús, quien también se dedicaba a la construcción y lleva cinco años en paro. "Yo también trabajaba en la construcción, de pintor, de electricista? Pero ahora no encuentras trabajo de nada y hay que sobrevivir como se puede".
Además, en su caso, ya agotó las ayudas. "Yo no recibo nada. Sobrevivo como puedo", cuenta Jesús, que afirma que la solidaridad entre compañeros "es lo más importante".Los compañeros nos ayudamos. Si consigues un euro, dos o tres, se compra comida y se comparte entre todos".
De hecho, es así como aseguran que consiguen los alimentos ya que, excepto la ayuda que les ha proporcionado en alguna ocasión la organización Calor y Café, que dirige Sor Ana, afirman que no han recibido asistencia de "ninguna otra organización o institución".
"Si vas a cualquier sitio, te piden 14.000 papeles aunque sea para darte un plato de comida. ¿Dónde se ha visto eso? La comida ya la busco yo, y me evito estar todo el día dando volteretas", señala Jesús, quien considera que "cada vez las instituciones lo hacen peor". "Cada vez hay más gente en la calle. Si antes había 100, ahora hay 400", añade.
Ambos explican que decidieron meterse en los camerinos del parque Islas Canarias, porque no tienen otro sitio donde dormir. "El Ayuntamiento lo ha tapiado todo", afirma en referencia a las casas deshabitadas que utilizaban antes, y a las que ya no tienen acceso. "A nadie le gustaría que fuera a su casa, rompiera la puerta y me metiera dentro, porque a mí no me gustaría. Pero esto es del Ayuntamiento y el Ayuntamiento es de todos", apunta Emilio, quien dice que si los echan, se buscarán "otro sitio donde dormir".
Unas obras "que no fueron entregadas"
A esta situación que este lunes desvelaba el diario La Provincia se une el deterioro que sufren las instalaciones del parque Islas Canarias. Desde el Consistorio aseguran que "no pueden hacer nada", ya que las obras "no fueron entregadas al Ayuntamiento" por desacuerdos con la Promotora Inmobiliaria Parque Islas Canarias, que fue quien ejecutó las obras.
En concreto, la sociedad reclama al Ayuntamiento una deuda de casi dos millones de euros, pero desde el Consistorio aseguran que la promotora "presentó un proyecto cuyo precio era superior al convenio que había inicialmente", según afirma el alcalde de Arrecife, Cándido Reguera.
A ello hay que añadir la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, que anuló la licencia del parking subterráneo que se encuentrabajo el parque. Una licencia que fue otorgada por la ex alcaldesa María Isabel Déniz y anulada en el año 2006. "Hay una situación jurídica complicada y buscamos una fórmula que dé respuesta a que el parque no siga así. Es necesario que se llegue a un punto de encuentro", ha apuntado Reguera.
