"Sabíamos que en cualquier momento podía suceder una desgracia". Son palabras de una abuela, cuya nieta de 5 años acude al colegio La Destila, en Arrecife, donde el pasado viernes día 4 un vehículo atropelló a cuatro personas, entre ellas a un niño de 3 años. La falta de vigilancia policial, la velocidad con la que circulan los coches por esta calle y la estrechez de la acera se perfilan como las causas de este incidente. Los familiares se muestran cada vez más preocupados por la seguridad de los alumnos de este centro escolar.
Y es que los padres aún tienen en mente cómo un vehículo atropelló a cuatro personas a las puertas de este colegio, en la calle La Inés. El suceso tuvo lugar a la misma hora en la que salen los niños del colegio, entorno a las 13.15 horas.
A esa hora, había un vehículo aparcado en la acera, a escasos metros de la puerta por donde salen los alumnos. De pronto, una furgoneta se subió a la acera y arrolló al coche estacionado, que atropelló por alcance a cuatro personas, entre ellas un menor. Todos ellos tuvieron que ser trasladados en ambulancia al Hospital Doctor José Molina Orosa. Las otras tres personas heridas en este atropello múltiple fueron dos mujeres de 56 y 26 años y un varón de 53 años.
"Pegó un estampido tremendo. La camioneta venía rápido y le dio al otro coche hasta desplazarlo. Fue un pedazo de golpe", afirma esta abuela, que prefiere no facilitar el nombre. Son muchos los familiares que creen que por esta zona los coches circulan "a demasiada velocidad". "Aquí los coches pasan a toda pastilla. Parece una carretera general", señala esta mujer.
Pero, además, las aceras son demasiado estrechas para soportar la avalancha de niños que salen del colegio, a los que les espera un nutrido grupo de padres. "Hay que tener mucho cuidado al salir, porque las aceras son pequeñas. Y eso ocurre en todo Arrecife, que es más que la calle Real, aunque a veces se nos olvida. Espero que cuando construyan el nuevo colegio lo tengan en cuenta, porque esto no puede ser", señala otro abuelo, mientras espera a las puertas de La Destila para recoger a su nieto de cuatro años.
Sin vigilancia policial
Pero, sobre todo, los familiares de los alumnos de La Destila exigen vigilancia policial durante la salida y la entrada de los estudiantes. "Deberían poner policías, porque es lo lógico a las puertas de un colegio. Además, tampoco tienen que estar tanto, sino que les vale con 20 minu-tos", señala este abuelo.
A su lado se encuentra una madre de una menor de 3 años, que asegura que "no está tranquila" por la seguridad de su hija. "Es muy peligrosa esta calle. No sólo porque la acera sea estrecha, sino que además no hay protección ni nada", insiste. "El colegio no sólo está viejo y es peligroso para los alumnos, sino que aquí nadie controla ni las salidas ni las entradas. Los coches pasan como aviones y los policías ni aparecen", critica otro padre, cuyo hijo ya mayor estudió en este colegio.
"Son muchos años con la misma historia. Mis hijos también estudiaban aquí y era igual. Es horroroso y de vergüenza. Un día pasará algo y yo creo que los políticos ni reaccionarán. Esperemos que esto se solucione para el curso que viene porque no podemos tener esta preocupación todos los días. Al final, los alumnos se acabarán largando de La Destila", señala otra abuela.
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