El grupo IU-Izquierda Verde ha emitido una pregunta al gobierno en la que afirma que los créditos del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD) españoles "se invierten en potenciar la infraestructura petrolera del país a beneficio de multinacionales como Repsol y Woodside, mientras la población vive en la miseria".
"Nos parece significativo que se concedan créditos FAD precisamente en relación con la explotación de hidrocarburos en Mauritania", declaró Joan Herrera, diputado de Izquierda Verde, "que realiza la misma compañía participante en un consorcio con Repsol para la exploración y explotación de hidrocarburos en Canarias".
Según el redactor de la pregunta, Octavio Hernández, "la paralización de las prospecciones cerca de Fuerteventura y Lanzarote se deben a que Woodside ha dado prioridad a los yacimientos mauritanos, mientras Repsol prioriza los bloques de exploración de gas natural situados en el Atlántico entre España y Marruecos al sur de Andalucía, quedándose descolgada Canarias debido a los intereses del Consorcio".
El 11 de marzo del año pasado el Consejo de Ministros aprobó la concesión de un crédito FAD de más de cuatro mil dólares a la República Islámica de Mauritania para financiar la ampliación de un proyecto que asegurase el abastecimiento de productos petrolíferos en el puerto de Noakchott. En 2001 también se autorizó otro crédito FAD de más de 22 mil dólares al mismo país para construir un fondeadero para petroleros y un parque de depósitos en el puerto de la capital.
El grupo Izquierda Verde explica que, a su vez, en 2003 la compañía petrolera australiana Woodside lleva a cabo la explotación de dos pozos petrolíferos frente a las costas de Mauritania, y que en enero de 2002 el Gobierno concedió a Repsol nueve permisos entre la costa de Marruecos y las islas de Lanzarote y Fuerteventura, mientras unos meses después se anunciaba la creación de un consorcio entre Repsol, la petrolífera alemana RWE-DEA y Woodside, para la exploración de gas y petróleo en Canarias.
En su respuesta, el Gobierno central justificó estos créditos alegando que "fomentan las exportaciones de bienes y servicios españoles y contribuyen al desarrollo de Mauritania por la creación de empleo, y porque permitirá un atranque de los barcos con una capacidad acorde a la evolución del consumo, así como la creación de una reserva estratégica en productos petrolíferos".