Fue para el director general de Costas, José Fernández, la candidata ideal para engrosar las adquisiciones que está llevando a cabo el Ministerio de Medio Ambiente en su Programa de Adquisición de Fincas en el Litorial. Declarada la utilidad pública de la Isleta de La Santa, se inició un procedimiento "largo y complejo" que finalmente se ha cerrado con un acuerdo entre Costas y La Caja de Canarias, propiedad de los terrenos. Este viernes José Fernandez y Juan Manuel García Falcón, presidente de la entidad, firmaban el convenio.
Ministerio y desde este viernes ex propietaria de los terrenos han celebrado que este espacio que contempla la Isleta y las Salinas de La Santa quede ahora cercado a una actuación urbanística. "No hay ninguna posibilidad de que la Isleta de La Santa vuelva a ser urbanizable", ha declarado José Fernández. El director lo aseguraba junto al alcalde del Ayuntamiento de Tinajo, Jesús Machín, el senador socialista, Marcos Hernández, la presidenta del Cabildo, Manuela Armas, y el Director Insular, Carmelo García Déniz, que han asistido al acto protocolario en la Dirección Insular.
A partir de ahora, según José Fernández, este espacio pasa a ser de uso público y desde el Ministerio están obligados a recuperar sus valores naturales. El director general de Costas ha confirmado que se va a realizar un concurso de ideas con el fin de diseñar proyectos de futuro que conviertan La Isleta en un espacio protegido. El primer paso será recuperar la naturalidad de los flujos hidráulicos.
Otras expropiaciones
El director general de Costas también ha hecho referencia a otras expropiaciones que el Ministerio de Medio Ambiente está negociando en Lanzarote. Están abiertos los procedimientos de adquisición de los islotes de Alegranza, Montaña Clara y Roque del Este, y la integración del área del Hotel Papagayo Arena.
En los dos casos asegura que se están manteniendo negociaciones formales con los propietarios y José Fernández espera que siga los mismos pasos que la adquisión de La Isleta de La Santa, es decir, por un acuerdo. En todo caso la declaración de utilidad pública es irreversible, por lo que por convenio o por expropiación forzosa, estos espacios pasarán a ser de dominio público marítimo terrestre.
