-¿Cómo anda el Ayuntamiento de San Bartolomé desde el punto de vista económico?
-Siempre es mejorable, como no puede ser de otra manera, pero como usted sabe nosotros presentamos en mayo un balance sobre el Plan de Saneamiento que aprobamos el año pasado, donde se establecía que el Ayuntamiento de San Bartolomé tenía que cumplir una serie de medidas para corregir un déficit que teníamos por el que en aquel momento los ingresos no cubrían la suma de los gastos y los préstamos. Un año después, en mayo de 2005, cuando presentamos la valoración del Plan de Saneamiento, que establece que en tres años tenía que corregirse eso, ya podemos decir que el ahorro neto, que era la diferencia entre los ingresos y los gastos y préstamos, pues ya era positivo en algo más de 200.000 euros. Es decir, hemos mejorado evidentemente tomando una seria de medidas que pasan por mejorar la capacidad de ingresos sin subir los impuestos por un lado y por otro lado, pues, reducir o controlar lo que son los gastos. En definitiva, el Ayuntamiento de San Bartolomé tenía en aquel momento dificultades económicas por el gran incremento de población que exigía pues una serie de gastos importantes al ser el segundo municipio en población.
-Estamos ya finalizando el año, ¿para cuándo tiene previsto aprobar los presupuestos?
-Tiene usted toda la razón. Con el arranque del curso político, tras el periodo estival, estamos empezando a preparar lo que va a ser el presupuesto del año que viene. Ya le adelanto que no va a estar aprobado antes del 31 de diciembre, sino que voy a esperar a la liquidación de 2005. O sea, muy probablemente será aprobado en enero o febrero porque con toda seguridad voy a tener que aprobar otro presupuesto con superávit. La intención de este concejal es la de seguir saneando y no voy a presentar unos presupuestos saneados sino un presupuesto superavitario, es decir que los ingresos sean superiores a los gastos para mejorar ya en 2006 definitivamente lo que son las cuentas del municipio.
-¿Qué va a hacer entonces, un presupuesto inflado deliberadamente?
-No, al contrario. Un presupuesto superavitario no significa que sea un presupuesto inflado. O sea, va a ser un presupuesto donde si vamos a recaudar tres, vamos a gastar dos. Entonces no vamos a inflarlo, ni mucho menos. Va a ser un presupuesto realista, pero la idea es buscar también elementos financieros que nos puedan permitir desarrollar todo aquello que queremos desarrollar. Como usted bien sabe ya llevamos dos años y medio de legislatura y queda un año y medio para acabar la misma y se han planteado bastantes proyectos que ahora mismo tenemos en mente y todo el equipo de gobierno quiere desarrollar esos proyectos antes de acabar esta legislatura. Va a ser complicado puesto que nuestra capacidad inversora es bastante limitada, como le decía somos el segundo municipio en población pero quinto en ingresos, pero bueno para eso hay instrumentos financieros que nos pueden permitir tener una cierta capacidad de inversión importante para absorber todos esos proyectos. En definitiva, es llevar a cabo el proyecto legítimo de gobierno.
-¿En este sentido, qué avances se han realizado con respecto a la Carta Municipal?
-Muchísimos. Era nuestro ‘caballo de batalla' cuando nos presentamos a las elecciones en mayo de 2003, nosotros pretendíamos que se adecuasen esos ingresos, porque no olvidemos que son ingresos que proceden del Gobierno de Canarias en base a la población que tengamos. Entonces la Carta Municipal es un ingreso que en aquel momento no se actualizaba desde el año 63, es decir hasta el 2003 San Bartolomé estaba recibiendo los dineros como si fuese un municipio de 3.000 habitantes. Evidentemente había un agravio comparativo importantísimo, gracias a Dios se corrigió tras arduas disputas en el Parlamento regional y bueno se tomó una decisión a medias que permitió pasar de prácticamente unos 900.000 euros anuales a lo que estamos percibiendo hoy día, que estamos hablando de cerca de dos millones de euros, es decir, se incrementó en más del doblo. De todas maneras, San Bartolomé se vio afectada puesto que no se aplicó la ley en su rigurosidad, no se tomó como base una serie de parámetros y hemos dejado de percibir calculo yo unos 400 euros menos de los que nosotros venimos pidiendo. Es decir, nosotros teníamos que haber pasado de 900.000 euros al año a 2.400.000 y hemos perdido en el camino 400.000 euros. Pero bueno, ese incremento de ingresos ha permitido que lo que es el conjunto de ingresos suba de forma importante y necesaria junto con otros capítulos de ingresos. Por eso comentaba antes que el ahorro neto se ha convertido ya en positivo. Después de una gestión ardua del equipo de gobierno hemos conseguido que económicamente nos encontremos mucho mejor.
-Por otro lado, se habla en distintos foros que tanto Federico Toledo como usted y algunos otros miembros del PP tenían previsto abandonar el partido en desacuerdo con el aplazamiento constante del congreso extraordinario del PP insular. ¿Qué hay de cierto en esto?
-Pues en absoluto. Javier Betancort es una persona que ha sido, es y será siempre del PP. Evidentemente uno siempre cuando uno toma la decisión de meterse en política y en el PP tiene que ser en firme. Soy una persona de 29 años que ha visto muchas cosas en política, que ha querido entrar en política por cambiar determinadas formas y actitudes... Yo sé que un político llega a un partido y se marcha a otro para posteriormente regresar y después marcharse de nuevo. Yo creo que eso es falta de seriedad. Javier Betancort creo que es una persona seria en ese aspecto y en ningún momento me he planteado eso. Lo que sí es cierto es que uno está dentro de un partido político, acata lo que son las decisiones de la mayoría, aunque le puede gustar más o menos una serie de directrices y bueno es cierto que actualmente tras unos meses un poco difíciles, porque el PP ha perdido dos instituciones importantes como era Arrecife y sobre todo la Presidencia del Cabildo con Francisco Cabrera al frente y también al anterior presidente insular Alejandro Díaz, se establecen directrices y hay voces, entre ellas la mía, que piden un congreso extraordinario que restablezca los órganos colegiados del propio partido. Actualmente hay una gestora tendente a preparar el congreso que parece que se está aplazando o no se va a celebrar y entonces mi voz es la de querer el congreso, pero en modo alguno voy a decir que me marcho del partido si no se celebra finalmente. Al contrario, yo podré formar parte activamente de la política como actualmente lo estoy haciendo en un cargo público, formar parte activamente del PP o no, pero nunca que yo me vaya a marchar. Son simples rumores que existen y el tiempo pondrá a cada uno en su lugar.
