El ex gerente de Urbaser en Lanzarote, Jacinto Álvarez, ha vuelto este jueves a los Juzgados de Arrecife para declarar ante la juez que instruye el caso "Unión". Álvarez, que fue detenido el pasado 19 de abril de 2010, ha accedido a los Juzgados a primera hora de la mañana junto a su abogado.
Tras su detención, el ex gerente de Urbaser en Lanzarote pasó cerca de un mes en prisión provisional y poco después de salir de la cárcel fue despedido de la empresa. Álvarez confesó el pago de sobornos a cargos públicos y funcionarios de la isla, en relación con el contrato que Urbaser mantiene para la limpieza, la recogida de basuras y el mantenimiento de parques y jardines de Arrecife, firmado en tiempos de la ex alcaldesa, María Isabel Déniz.
Además, Álvarez responsabilizó a directivos de Urbaser en Madrid, vinculándoles al pago de sobornos. Después del arresto del ex gerente, se detuvo también a cuatro responsables de la empresa.
Durante los registros realizados por la UCO, los agentes encontraron documentación comprometedora de varias empresas, así como unas libretas donde el propio Jacinto Álvarez fue apuntando durante años los presuntos sobornos que pagó a políticos y técnicos.
El levantamiento del secreto de sumario hace unos meses también reveló que para este caso fue clave la colaboración de dos trabajadores de Urbaser. Uno de ellos se presentó voluntariamente ante los agentes de la UCO, un mes después de que estallara la primera fase de la Operación Unión, en mayo de 2009, para denunciar las supuestas irregularidades de la empresa.
Otro empleado se sumó a la denuncia y ambos estuvieron aportando datos durante casi un año. Durante este tiempo, se fue gestando lo que después sería la Operación "Jable".
