RICARDO JORDÁN
Con los sentimientos divididos por la alegría de ser proclamada nueva presidenta del Cabildo de Lanzarote y la tristeza auspiciada por los acontecimientos vividos en los dos últimos años de legislatura, Inés Rojas de León pidió durante su discurso de investidura "que todos nos volvamos a ilusionar, que nos reconciliamos y adquiramos cordura y conciencia de todo el bien que podemos hacer por la gente y esta tierra".
"Devolvamos la dignidad, el respeto y el sosiego a nuestras instituciones, para que tengamos una Isla capaz de resolver sus problemas y mejorar sus condiciones de vida", dijo en su toma de posesión la que ya es la séptima presidenta del Cabildo en la presente legislatura.
Desafíos
Entre los desafíos e intereses principales a los que deberá enfrentarse el nuevo Gobierno y que según Rojas, "juntos los conseguiremos", la nueva presidenta citó "las aguas territoriales, el Estatuto de Autonomía, la Ley Electoral, el Plan Territorial Especial, las plataformas petrolíferas, la superpoblación, la insuficiencia de las infraestructuras básicas y los servicios públicos".
"Están encendidas todas las alarmas, y la luz verde del Gobierno de la Isla debe brillar con luz propia", exhortó la dirigente.
Inés Rojas accedió ayer al cargo gracias al mecanismo de la proclamación, apoyado en los informes jurídicos. Cabe recordar que tanto la Junta Electoral Central (JEC) como la [Secretaría del Cabildo->http://www.lavozdelanzarote.com/article.php3?id_article=226], a pesar de no ser dictámenes vinculantes ni preceptivos, daban la razón a la que hasta ayer era la presidenta en funciones, la representante del Partido Popular (PP), [Dolores Luzardo->http://www.lavozdelanzarote.com/article.php3?id_article=225], y postulaban que más que por votación, lo más adecuado era designar a la nueva presidenta por proclamación.
Estrategas hasta el último minuto
A la espera de una posible moción de confianza que permitiera la cesión de la Presidencia de Inés Rojas al secretario general del Partido Socialista (PSC-PSOE), Manuel Fajardo, tal y como el pacto a tres bandas entre socialistas, nacionalistas e insularistas proponía, y después de reuniones que se prolongaron hasta altas horas en la jornada previa, finalmente la sorpresa saltaba, o intentaban darla, las consejeras afines a la facción de Dimas Martín en el PIL. Mª José Docal y Plácida Guerra se reunían minutos antes de la sesión extraordinaria con el secretario general de la Corporación, Francisco Perdomo, e intentaron presentar su renuncia a la posibilidad virtual de acceder a la Presidencia, presionando para que la integrante escindida del PIL, Inés Rojas, se negara a ser investida, al igual que sus compañeros de lista, lo que finalmente habría servido la Presidencia en auténtica bandeja de plata al socialista Manuel Fajardo.
Es digna de destacar la preferencia del sector afín a Dimas Martín por que antes de que los "tránsfugas" de su partido, gobernaran los socialistas. Sin embargo, la Secretaría General del Cabildo rechazó tales renuncias aduciendo que no tenían validez e imponiendo el criterio de la [Junta Electoral Central->http://www.lavozdelanzarote.com/article.php3?id_article=61], que señala que la Presidencia debía ser asumida por la formación más votada en las elecciones del Cabildo en mayo de 2003, en este caso, el PIL.
Beneplácito socialista
De ahí que los socialistas dieran el beneplácito para que Inés Rojas fuera la nueva presidenta y con ello, ésta alabó el gesto del PSC-PSOE, esperando en su discurso de investidura que éste sea "más que un pacto, el pacto definitivo", y que sirva para dar estabilidad y gobernabilidad a la Isla hasta 2007, cuando se celebren los próximo comicios regionales y locales.
El nuevo grupo de gobierno en el Cabildo está compuesto por los miembros del PIL contrarios a Dimas Martín, CC y el PSC-PSOE, lo que significa un respaldo del que el Gobierno insular ha carecido desde hace años, tal y como destacó el vicepresidente segundo, Mario Pérez. "Ilusionado y con renovadas ganas de seguir trabajando por la Institución", dijo sentirse el también consejero delegado de Inalsa, que aseguró que en las crisis de esta legislatura "se ha utilizado como pretexto para la ruptura de los grupos de gobierno. Ni con Mª José Docal ni con Francisco Cabrera, los motivos de las crisis no tenían nada que ver ni con el Cabildo ni siquiera con Lanzarote, sino con lo que sucedía en el despacho del señor Soria en Las Palmas o, en este caso, con Dimas Martín", indicó.
El socialista Manuel Fajardo se mostraba ayer satisfecho a pesar de no alcanzar al final la Presidencia, e insistió en que ser finalmente vicepresidente primero no es ningún decoro, aclarando que ese iba a ser su cargo en el pacto suscrito inicialmente con el PP, y que los populares sostienen que los socialistas incumplieron.
No a una nueva crisis
Fajardo reconocía que "no hemos querido protagonizar una nueva crisis ni por un minuto", en referencia a la posibilidad de someter a Inés Rojas a una moción de confianza y a la opción de que la Presidencia pasara, uno por uno, por los pilistas, hasta llegar a manos socialistas. "Si hubiéramos exigido el cumplimiento del pacto, hubiéramos generado otra crisis", dijo, revelando que la Presidencia de Inés Rojas ya estaba pactada hacía varios días. El líder del PSC confió en que hasta 2007 no se produzcan nuevos avatares que propicien más inestabilidad. "La gente de Lanzarote no se merece ni un segundo más esto, y por eso los socialistas hemos entrado en el grupo de gobierno (...) espero que a partir de ahora trabajemos para recuperar el tiempo que lastimosamente se ha perdido con las distintas crisis de esta legislatura, con el único objetivo de solucionar los problemas de Lanzarote". Según Fajardo, "o se hacen las cosas bien de aquí al 2007, la abstención no será del 50 sino del 60 por ciento". El nuevo consejero socialista de Política Territorial, Carlos Espino destacó la necesidad de iniciar un nuevo proceso de concertación en la Corporación. "La clave no es que el grupo de gobierno saque adelante el Plan Especial Territorial por mayoría, sino que en él nos reconozcamos todos", dijo. "El papel del Consejo de la Reserva de la Biosfera, en este sentido, va a tener un papel fundamental", anunció.
Por su parte, la oposición sufre también variaciones, y al portavoz de Alternativa Ciudadana 25 de Mayo (AC-25M), Pedro Hernández, y a las dos consejeras de la facción oficialista del PIL, se les suman los tres representantes del PP, Francisco Cabrera, quien ha sido el último presidente y que dimitió tras quedarse sin minoría, Dolores Luzardo, hasta ayer presidenta accidental, y Ástrid Pérez, que se ausentó del pleno al haber dado a luz.
Ésta, que ya era la enésima crisis abierta en el Cabildo de Lanzarote, y que ha salpicado también a los ayuntamientos de Arrecife y [San Bartolomé->http://www.lavozdelanzarote.com/article.php3?id_article=277], se inició con la repentino cese de los consejeros de Coalición Canaria decretada por el anterior presidente de la institución, el popular Francisco Cabrera. Tras perder el apoyo del PIL y presentar su dimisión el último presidente, la Primera Corporación de Lanzarote ha vivido sin gobierno y con una tremendo enfrentamiento entre la mayoría de grupos políticos que pugnaban por el poder.
