Las quejas ciudadanas por la falta de abastecimiento de agua, sobre todo en el norte de la Isla, no cesan. Esta redacción ha recibido numerosas llamadas de vecinos de Punta Mujeres y Nazaret, y también de algunos barrios de Arrecife, en las que se pone de manifiesto el malestar porque el agua no llega con regularidad a las viviendas.
La Voz contactó con una fuente muy cercana a la empresa y sostuvo que el principal problema es eléctrico, esta vez no por los cortes de Unelco. En concreto, radica en que a Insular de Aguas de Lanzarote (Inalsa) le hace falta un transformador para alimentar tres bombas de impulsión de la estación de bombeo Maneje, con el fin de sacar el líquido a la zona norte de Lanzarote.
Inalsa actualmente tiene capacidad de producción, sin embargo, no posee suficiencia en el bombeo del agua, y por tanto la distribución está debilitada. Caso a parte es la capacidad de almacenamiento, que también está mermada, pero que no tiene nada que ver con la insuficiencia en el suministro que sufren ahora las localidades del norte.
Tubería nueva
De Maneje a Mala hay una tubería nueva instalada en el marco del Plan Hidrológico Nacional, además hay una estación de bombeo en Maneje, con tres bombas de paquete para esa tubería, pero, según la información que recibió este diario, esas bombas no funcionan sencillamente porque les hace falta suministro eléctrico como consecuencia de la carencia de un transformador. La fuente explicó que Unelco envía la corriente en alta a 20.000 voltios, e Inalsa necesita transformarla a 380 voltios, que es el tipo de corriente con que operan las bombas de impulsión.
Con traje nuevo y sin zapatos
Es probable que Inalsa aún no haya pedido el transformador, que si lo pidió no haya llegado o que ya esté en la Isla sin instalar, pero en todo caso las bombas no están en funcionamiento, subrayó la fuente informativa. Lo curioso es que el transformador hace parte del proyecto de distribución del Plan Hidrológico Nacional, así como la planta de bombeo de Maneje y la nueva tubería del norte, estas dos últimas ya instaladas. Es como ir a una boda con el mejor traje y sin zapatos. Entre tanto, los vecinos de Los Valles, por citar sólo un ejemplo, siguen recibiendo el agua en cubas.
La versión del consejero delegado
Mario Pérez, consejero delegado de Inalsa, fue preguntado en Radio Lanzarote por las causas de los problemas de abastecimiento de agua de la Isla, pero aludió a una reunión que mantuvo con los ayuntamientos y el Cabildo, en donde expuso las necesidades hídricas de la Isla a corto y largo plazo, sin mencionar en concreto la carencia del transformador en la estación de Maneje.
Pérez confía en que la nueva planta desaladora de Janubio, contemplada en el Plan Hidrológico Nacional, vea luz el próximo año, así como otras infraestructuras muy importantes para Lanzarote. El consejero delegado incidió en la necesidad de renovar la obsoleta red de distribución de la Isla compuesta por más de 400 kilómetros de tubería, "la mayor parte con más de 25 años de uso".
Problemas de almacenamiento
A principios de agosto Inalsa se vio obligada a parar dos líneas de producción, de 6 mil metros cúbicos diarios cada una, porque el nivel de los tanques de almacenamiento de la empresa pública alcanzaron su punto máximo.
Esta situación es muy rara porque en más de una oportunidad hemos escuchado a los responsables de Inalsa decir que Lanzarote consume todo el agua que se produce, y además contrasta con las quejas de Inalsa en el sentido de que la producción de agua fue notoriamente afectada por los cortes de energía de Unelco. Una vez que la empresa suministradora de energía normalizó el servicio, entonces, dónde se está almacenando el agua si la producción excede el consumo.
Inalsa solicitará al Gobierno de Canarias, dentro de las inversiones previstas para Lanzarote en el Plan de Dinamización Socioeconómico, el aumento de la capacidad de almacenamiento cifrada actualmente en tres días de producción. La Isla quedaría desabastecida si por contaminación u otra circunstancia la empresa no pudiera desalar agua durante tres días.
Al margen de la capacidad de almacenamiento de Inalsa, la empresa también prevé solicitar al Ejecutivo, de cara a los presupuestos 2006, la renovación de los 451 kilómetros de redes de distribución por las importantes pérdidas que se generan. Según el consejero delegado, las pérdidas corresponden al 30 por ciento de la producción diaria.
