El director de producción de Unelco deja al descubierto un supuesto retraso de la Corporación insular para "trasladar" la central, a la vez que se desmarca radicalmente de la defensa en juicio hecha por su propia compañía hace tres semanas

"Hace cinco meses ya planteamos al Cabildo la necesidad de firmar un convenio para instalar una nueva central en otro sitio, y estamos esperando una respuesta"

La instalación de los silenciadores en dos de los diez grupos de la central de Unelco en Punta Grande estaba prevista desde hace un año, y no tiene nada que ver con el revés que supuso para la copmpañía la solicitud del ...

17 de mayo de 2006 (08:01 CET)
Hace cinco meses ya planteamos al Cabildo la necesidad de firmar un convenio para instalar una nueva central en otro sitio, y estamos esperando una respuesta
Hace cinco meses ya planteamos al Cabildo la necesidad de firmar un convenio para instalar una nueva central en otro sitio, y estamos esperando una respuesta

La instalación de los silenciadores en dos de los diez grupos de la central de Unelco en Punta Grande estaba prevista desde hace un año, y no tiene nada que ver con el revés que supuso para la copmpañía la solicitud del Ministerio Fiscal para que se cierre la planta por los ruidos que produce, según su director de producción, Ramón Rodríguez. El directivo, a su vez, manifestó una opinión totalmente contraria sobre la asociación de vecinos que presentó la demanda respecto a la que la propia Unelco ha expuesto en el proceso judicial en curso. "Se le niega legitimidad a la asociación demandante (...), una Asociación ecologista que como todas las asociaciones de esta naturaleza, parece que por definición, son contrarias a este tipo de instalaciones", por lo que "se impugna expresamente el hecho de que pueda ostentar titularidad alguna sobre los derechos" que se invocan en la demanda, sostiene el representante legal de Unelco en su contestación a la demanda. Sin embargo, el director de producción de Unelco ha dicho, en una entrevista concedida este martes al programa "Buenos Días, Lanzarote", de Radio Lanzarote, que le "extraña que alguien de Unelco haya dicho que los vecinos son un grupo ecologista; considero respetabilísimas las opiniones y los movimientos que hagan los vecinos, en absoluto los critico, y dudo mucho que alguien de Unelco los haya criticado".

-La consejera de Industria del Cabildo, Lourdes Bernal, anunció el lunes que Unelco va a instalar silenciadores en su central de Punta Grande para reducir su emisión de ruidos. ¿Esta medida de adoptará debido a la demanda judicial de los vecinos de la central, que piden su cierre por su acción contaminante, y que ya cuenta con el apoyo del Ministerio Fiscal?

- Lo que cambiaremos son los silenciosos de dos de los diez grupos diesel que tenemos, pero se trata de una medida habitual, que toda la gente que nos dedicamos a producir energía en el mundo hacemos, para ir mejorar lo que el suministrador de los equipos nos aconseja, a efectos de que el funcionamiento desde cualquier punto de vista sea óptimo, sea mejor. Cuando cambiemos esos silenciosos, vamos a cambiar también los bloques del grupo, que es alargar la vida y mejorar funcionamiento de esos grupos. Por ello, esto no tiene que ver con la demanda judicial de los vecinos en absoluto. La prueba está en que si fuera así, esa medida ya la hubiéramos adoptado sobre la marcha. Vamos a hacerlo cuando corresponde, que es cuando podamos parar el grupo. Esto se planifica con un año de antelación, porque en estos grandes motores, el suministro de una pieza supone mucho, y entonces esto hay que pedirlo con un año de antelación, cuando se hace la previsión de mantenimiento para el año siguiente, y entonces se programa para hacerlo en una determinada época, que es la que desde un punto de vista de la demanda y de las revisiones de otros grupos, encaja mejor.

- La instalación de estos nuevos silenciadores, ¿va a evitar que se siga dando el actual nivel de ruidos o vibraciones que existe en la zona?

- El actual nivel de ruido que hay en la zona, entra en lo que las declaraciones de impacto nos autorizan. Por supuesto que alguna mejora va a haber. Realmente no son los silenciadores, son los escapes; es como cuando a un coche se le cambia el escape, y evidentemente va a ayudar a reducir el nivel de ruido que emana.

- ¿Se están planteando seguir con este proyecto de mejoras para la central de Lanzarote?

- Por supuesto. De hecho, cualquier nueva incorporación ya lleva incorporadas esas mejoras que como le digo, son las que nos aconseja el fabricante del equipo, que continuamente está investigando para que en un ejercicio de competencias, su equipo sea cada vez mejor. Los suministradores nos van informando a nosotros de que por ejemplo conviene que se haga esto para alargar la vida, mejorar la combustión y también los niveles de ruido. Lo que tenemos que hacer, y nosotros lo hacemos por el bien no sólo de nuestros clientes, aunque es lo más importante, sino también por el propio funcionamiento del grupo, lo incorporamos habitualmente.

- En su defensa en el juicio que se está siguiendo debido a la demanda de los vecinos, que piden el cierre de la central de Punta Grande, en sus alegaciones en ese proceso, la compañía señala a los demandantes como un grupo ecologista, no representativo de los derechos de los vecinos de la zona...

- En absoluto yo he dicho nada de eso, y me extraña que alguien de Unelco haya dicho que los vecinos son un grupo ecologista. Creo que estamos en un estado de derecho, y cada uno decimos y defendemos lo que creemos. Yo considero respetabilísimas las opiniones y los movimientos que hagan los vecinos. En absoluto los critico, y dudo mucho que alguien de Unelco los haya criticado.

- La central eléctrica de Lanzarote ha crecido mucho con el tiempo ante el aumento de la demanda. ¿No sería ya tiempo de hablar de crear una planta nueva, modernizada, con una mejor infraestructura, capaz de atender la demanda y en un lugar adecuado?

- Sí, estoy totalmente de acuerdo con eso. En la última reunión que tuve en el Cabildo, hará cuatro o cinco meses, yo propuse redactar un convenio similar al que ya hemos redactado en La Gomera y Fuerteventura, para buscar precisamente un lugar en el que podamos ubicar la central de futuro. Yo fue el promotor y lo indiqué en esa reunión en la que estaban todos los alcaldes de la isla, y representantes del Cabildo. Esto es además un cuestión de seguridad: cuanto más puntos de suministro tengamos, menos vulnerables vamos a ser en cuanto a incidentes.

- ¿Cuál fue la respuesta que recibió la compañía cuando promueve ese convenio para una futura ubicación de la planta?

- Me imagino que las autoridades insulares lo estarán evaluando, porque en definitiva son quienes deben definir la ubicación mejor, atendiendo a medio ambiente, cercanías de núcleos poblados y otros condicionantes que sean interesantes para la isla. Nosotros ahí en definitiva vamos de la mano; no tenemos la capacidad para decidir en qué punto concreto debe ir. Nosotros podemos aportar nuestra experiencia, estudios, pero en definitiva todo esto debe ser algo que recojan planes insulares y que defina el Cabildo.

- En ese supuesto cambio de ubicación de la central, ¿el coste sería asumido por ambas partes, Cabildo y Unelco, o sólo Unelco?

- Bueno, eso no está definido, no tenemos ni un borrador, pero en otros convenios que tenemos en otras islas, como ya he dicho en Fuerteventura y La Gomera, se puede hacer de muchas maneras. Inclusive, un posible traslado lo puede pagar el sistema.Ahora mismo la idea sería tener una segunda central, que conforme fueran quedando obsoletos los grupos actuales, se iría incrementando la potencia en la nueva central, nunca en la antigua. Como ingeniero que soy, me gustaría que en las islas capitalinas hubiera tres centrales, porque opino que debe ser así, y en el resto de las islas, como mínimo dos centrales.

- Lo que es difícil de comprender es que en los polígonos industriales se evite la convivencia con zonas residenciales, y después en una zona estratégica, de máximo riesgo, donde están concentradas las plantas de Unelco, la Disa e Inhalas, a su alrededor haya residencias. ¿No sería mejor afrontar ya de una vez que esa convivencia no puede ser del todo buena y es ajena incluso al normal desarrollo de este tipo de polígonos?

- Totalmente de acuerdo en eso. Lo ideal es que en las industrias estén ubicadas en lugares donde no afecten a núcleos poblados. Eso está clarísimo. Pero yo soy de los viejos de esta empresa, y le puedo decir que Unelco adquirió la central en el año 1974. No recuerdo sí por entonces había muchas casas alrededor, y alguna sí habría, pero hablan de que la central llegó en el año 1985, cuando el Consejo de Ministros, que tuvo que autorizar la compra, lo hizo en 1974. Yo recuerdo de ir por allí en ese año a probar grupos, muy pequeños, porque atendían a una parte muy pequeña de la isla. El asunto ha sido que la central ha ido creciendo en el lugar original donde alguien, que no fue Unelco, había pensado que era el lugar ideal. Después, ha habido que ir incorporando nuevos grupos, para satisfacer la demanda, porque a todos nos gusta cuando llegamos a nuestra casa, que haya luz. Entonces, aunque este año ser ha ido atemperando un poco, los crecimientos que hemos tenido en Lanzarote en años pasados han sido espectaculares, y esto ha llevado a que la central se haya incrementado en un número de grupos que evidentemente a lo mejor no es lo ideal para la gente que vive en sus alrededores.

- ¿Está prevista una nueva ampliación para que en verano, cuando aumenta la demanda, no siga habiendo problemas en Lanzarote?

- El problema principal es de redes, no de generación. Las redes son las que a veces no pueden afrontar ese aumento de la demanda, y estamos trabajando y ya hemos hecho actuaciones para afrontarlo, como la interconexión con Fuerteventura, porque había problemas en llegar con la red hasta Playa Blanca. Ahora bien, supongamos que logramos solucionar el problema de redes, pues entonces también sería conveniente que pudiéramos aumentar la potencia, y para ello tenemos dos grupos que no están en funcionamiento porque estamos pendientes de que nos den la autorización para ponerlos en marcha.

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