Coincidiendo con la presencia de su barco Esperanza en las islas Canarias, Greenpeace ha querido mostrar su "preocupación" por el caso de Gloria Moreno, la sargento jefa del destacamento del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) en Lanzarote, que se enfrenta a un expediente disciplinario que podría apartarla definitivamente de esta especialidad tras haber tramitado algunas denuncias por vulneración de la legislación de protección del medio ambiente.
"Ante la sombra de una posible persecución del compromiso por proteger la naturaleza, resulta prioritario arrojar luz, esclarecer los hechos y actuar con contundencia. No es tolerable que la protección del medio ambiente acarree consecuencias negativas para quienes defienden la naturaleza frente a las agresiones de los que ponen sus intereses por encima del bienestar del resto y de las futuras generaciones", ha afirmado Javier García Raboso, portavoz de la organización ecologista.
Greenpeace exige que se investigue en profundidad "el posible acoso a la sargento Moreno como consecuencia de su labor de protección del medio ambiente, analizando la autoría y el contenido de los expedientes sancionadores y el recorrido de los mismos, y definiendo la relación de éstos con su actividad profesional". En este sentido, considera que "es necesario que los mandos de la Guardia Civil y las autoridades competentes adopten una postura decidida para no dificultar la tarea del Seprona, que lleva 30 años realizando una labor fundamental en la protección del medio ambiente en todo el Estado".
"Parece que su tesón ha incomodado a algunas personas"
En un comunicado, Greenpeace señala que desde su llegada a Lanzarote, "la sargento Moreno ha demostrado un especial empeño en la investigación y denuncia del maltrato animal y las agresiones medioambientales". Así, recuerda que "al poco de llegar, en 2015, encabezó una operación contra la caza furtiva de pollos de pardela cenicienta, un ave protegida que anida en el islote Alegranza". "Esta práctica ilegal era un secreto a voces en la isla, que ha sido tolerada durante décadas y que gracias a esta actuación parece que tiene sus días contados", señala la asociación, que afirma que Moreno "también ha tramitado varias denuncias por maltrato animal que habían quedado inexplicablemente paralizadas en la unidad operativa durante meses, y ha investigado las irregularidades ocurridas durante años en la perrera municipal de Arrecife, entre otras actuaciones destacadas".
A esto añade que "su intensa labor ha sido galardonada en varias ocasiones, todas ellas en reconocimiento a una trayectoria de compromiso y determinación en la protección del medio natural y la defensa de los animales en Lanzarote". Sin embargo, lamenta que "parece que su tesón ha incomodado también a algunas personas, habituadas a ignorar las regulaciones medioambientales para actuar en beneficio propio" y señala que "desde que volvió de su baja por maternidad, la sargento Moreno está sufriendo un claro hostigamiento, precisamente por cumplir con su obligación de proteger el medio ambiente", según ha declarado María Jesús Díaz Veiga, abogada de la sargento Moreno. "En apenas nueve meses, sus superiores han iniciado cinco expedientes contra ella. Varios de ellos han sido ya archivados, pero el último constituye una falta considerada "muy grave", que podría costarle su apartamiento definitivo del Seprona", destacan.
Greenpeace concluye su nota afirmando que "cada vez son más las voces de personas, organizaciones ecologistas e incluso asociaciones profesionales de la Benemérita que se alzan en apoyo a la funcionaria, reclamando que cesen las presiones contra ella, para que pueda seguir realizando una tarea tan prioritaria como es la defensa del medio ambiente".
Visita del barco Esperanza a las islas Canarias
El barco más grande de Greenpeace Esperanza está desde el pasado jueves en Santa Cruz de Tenerife dentro de la campaña 'A Toda Costa', en la que ha realizado durante estas semanas una gira por Barcelona, Ibiza y Cádiz para denunciar la destrucción de las costas a causa del urbanismo salvaje. El buque ecologista permanecerá en el muelle central de los Llanos en Tenerife todo el fin de semana para que las personas que lo deseen se acerquen a visitarlo.
Greenpeace denunció este viernes mediante el cierre simbólico de varias playas tinerfeñas la contaminación de sus aguas por la urbanización masiva.