- Con la que estaba cayendo en la Isla, usted ha estado callado cerca de un mes. Era prácticamente imposible arrancarle una declaración sobre la crisis de su Ayuntamiento. ¿Por qué?
- Bueno, he estado callado y creo que he hecho bien, a pesar de que con buena lógica los medios de comunicación quisieran saber el día a día de lo que ocurría en el municipio. He estado callado porque me gusta salir en los medios cuando creo que es oportuno salir. En estos momentos creía que no era oportuno sobre todo por respeto a los ciudadanos de San Bartolomé. El salir a hablar podría haber provocado más polémica en el mes y medio largo. En la rueda de prensa que di ya pedí disculpas a los medios de comunicación, para que entendieran que no salía por ese respeto que tengo al municipio.
- Supongo que estará satisfecho con su partido, porque el CCN dio la cara por usted hasta el punto de que llegó a condicionar el pacto de San Bartolomé de Tirajana con el de San Bartolomé de Lanzarote.
- Está claro que tengo que agradecer al CCN el apoyo que me han prestado y que llegaran incluso a condicionar el pacto de San Bartolomé de Tirajana con lo que pudiera suceder en nuestro Ayuntamiento. Estos días se ha hablado mucho y se ha generado cierta polémica sobre el lugar en el que me encuentro, que si en el CCN que si en CC... Ya he dicho y repito ahora que me presenté en el año 93 en una lista de CC en la que sacamos cinco concejales; luego se vivió la polémica en CC, lo que es una pena. Siempre he dicho que los nacionalistas deberíamos estar unidos, pero ha sido imposible. En todo momento he militado en CC a través del CCN, y sigo estando donde estaba. Debo agradecer a los cinco compañeros que pertenecíamos a CC su apoyo, porque la crisis nacionalista no se ha notado; todos hemos asumido que en San Bartolomé existe un único grupo, que es el de CC, y el portavoz de CC es Juan Antonio de la Hoz. Por encima de las ideas políticas y de las siglas está el municipio y la responsabilidad que asumimos cuando nos presentamos a las elecciones. Por tanto, que quede claro que en San Bartolomé gobernamos cinco compañeros de CC unidos como una pieza.
- Tampoco se tiene que llevar mal con la dirección insular de CC, porque fueron ellos los que montaron todo el potaje al empeñarse en incluir el Ayuntamiento de San Bartolomé en el pacto tripartito.
- No sólo me llevo bien con CC, también me llevo bien con el PIL y con otros partidos. Tarde o temprano los nacionalistas de verdad terminaremos estando juntos. También me llevo bien con la oposición.
- ¿Se lleva bien con los socialistas?
- Pues sí, muy bien. De hecho, al día siguiente del pleno, el sábado, estuve hablando con el compañero Andrés Stinga y dejamos claro ambos que lo sucedido no era más que un asunto político que nada tiene que ver con lo personal, cosa que le agradezco enormemente. Creo que eso es lo bonito, que no se confunda la política con las cuestiones personales.
- ¿En algún momento vio peligrar la Alcaldía, se vio fuera de su actual cargo?
- Me gustaría hablar de forma positiva sin tener que volver atrás, pero también hay que explicar las cosas. El día 7 de junio tuvimos una reunión en la que había dos miembros del PSC, dos miembros de CC y un miembro del PIL. En ese encuentro se planteó por parte del PSC que era difícil poder apoyarme por temas históricos. Le garanticé a los socialistas que el día 8 de junio a las 8 de la mañana iba a presentar mi dimisión como alcalde de San Bartolomé. Nadie lo puede negar. Fue una sorpresa cuando el propio PSC me pidió que no dimitiera y que buscara otras soluciones. Me gustaría salir de la Alcaldía cuando termine la legislatura, pero también es cierto que estaba dispuesto a sacrificarme para que San Bartolomé no volviera a pasar por las épocas negras del pasado que creo que a ninguno nos conviene. Por lo tanto, en ningún momento temí por la Alcaldía, pero es cierto que se podría haber presentado una moción de censura. Fue más de mes y medio de polémica, y llegó un momento en el que dije que me marchaba. Si se hubiera logrado una mayoría por otro lado, habría sido algo lógico que me marchara a la oposición.
- Lo que está claro es que ha habido un grupo compacto que no se ha querido separar de usted, y algo tendrá el agua cuando la bendicen. Pasando página, ¿qué puede decir del futuro, por qué se ha producido la incorporación de Olimpia Martín?
- En primer lugar tengo que agradecer a los compañeros de CC, del PIL, del PNL y del CCN que hayan confiado en mí. La verdad es que eso significa que teníamos antes de la crisis un grupo de gobierno compacto que funcionaba muy bien y ahora seguimos teniendo el mismo grupo de gobierno...
- Perdone que le interrumpa, pero, ¿qué tipo de garantías tiene de que el PP no puede volver a hacerle una faena similar a la que le hizo?
- La verdad es que no sé si es positivo o negativo, pero yo confío plenamente en las personas. He dicho muchas veces que a pesar de ser un grupo de gobierno que se inició con tres fuerzas políticas, funcionamos mejor que algunos grupos de gobierno que sólo tienen un color político. Eso se consigue con seriedad y cumpliendo en mi caso con los compromisos asumidos con el resto de concejales, unos firmados y otros sin firmar. También es cierto que ese compromiso que yo tengo con ellos es el mismo que les pido que ellos tengan conmigo. Por tanto, en ningún caso se me pasa por la cabeza que los concejales del PP se puedan marchar nuevamente del grupo de gobierno, más que nada porque sé que son gente seria y gente que está trabajando por el bien del municipio. Hemos repartido las áreas de una manera lógica, poniendo a cada persona que mejor puede defender cada departamento al frente. No temo en absoluto a nada, sobre todo porque los diez concejales que gobernamos tenemos el compromiso de estar hasta el último día de legislatura, incluso dentro de la campaña electoral, todos unidos luchando por la estabilidad para que las épocas pasadas de San Bartolomé se olviden de una vez.
- ¿Tenemos Miguel Martín para rato, o está pensando ya en retirarse de la política?
- Pues no lo sé. En estos momentos me estoy planteando terminar la legislatura y luego ya veremos lo que hago. Como alcalde no llevo muchos años, pero sí llevo muchos años en el Ayuntamiento. Me gustaría que gente joven entrara en el Ayuntamiento con ideas renovadas. Dentro del grupo de gobierno hay gente muy válida que me gustaría que se quedaran en el Ayuntamiento.
- Entrando en los temas que preocupan más a sus ciudadanos, ¿qué sucede con el Plan General, con ese documento que en su municipio tampoco parece que sale adelante?
- Nosotros tenemos un programa de gobierno que es el mismo que presentamos en 2003 que se ha cumplido en muchos aspectos. Otras cosas no las hemos cumplido, pero esperamos cumplirlas antes de 2007. Con respecto a estos dos años que nos quedan creo que es muy importante potenciar las acciones sociales que favorezcan a los más desfavorecidos, porque en San Bartolomé, como sucede en toda la Isla, hay personas que no tiene trabajo y que por circunstancias de todo tipo lo pasan mal; vamos a intentar echarles una mano. En el tema cultural y patrimonial estamos haciendo una gran labor, pero lo vamos a potenciar mucho más. En el tema de la zona industrial seguimos con la misma ilusión y la misma firmeza, convencidos de que se puede sacar adelante. En estos días se está terminando el saneamiento de Playa Honda, y dentro de poco se va a presentar el desarrollo de las infraestructuras de la zona. Como sabe, hace pocos días presentamos la bandera azul que por primera vez ondea en la playa de Guacimeta, y queremos seguir conservándola y conseguir otra.
- No me ha hablado del Plan General.
- Bueno, el Plan General de San Bartolomé se encuentra en estos momentos en las manos de todos los concejales, y vamos a empezar a reunirnos con la oposición para sacarlo adelante con el objetivo de ordenar nuestro territorio de forma positiva. También estamos pendientes del incremento de las infraestructuras, queremos potenciar el alumbrado público, la limpieza, las aceras, los bordillos... San Bartolomé tiene por delante un futuro muy positivo. La zona industrial nos va a dar una economía muy importante para todos.
- Por cierto, la idea esa de hacer un hipódromo, ¿fue una broma o realmente se puede sacar adelante?
- No, no, de hecho espero que antes de que termine la legislatura podamos cumplir con el sueño de hacer más que un hipódromo un lugar de ocio en el que contar con parques infantiles, un buen restaurantes y la pista para las carreras.
- Siempre habla de hacer muchas cosas, pero la oposición asegura que no tiene dinero suficiente para hacer nada, que deben más que Alemania cuando perdió la guerra.
- No sé cómo están los demás ayuntamientos de Lanzarote, pero nosotros no debemos más de lo que deben el resto de los ayuntamientos de la Isla, con la salvedad de que nosotros tenemos un futuro económico espléndido todavía por desarrollar que vendrá de la mano de la zona industrial.
- ¿Pero, cuándo estará en marcha el planeamiento definitivo de la zona industrial?
- Pues ya, antes de final de año vamos a ver las máquinas trabajando para sacar la infraestructura de la zona industrial de Playa Honda. El Ayuntamiento empezará entonces a dar las licencias de obra que de momento están paralizadas. No se han dado las licencias para no entorpecer el desarrollo de la zona industrial.
- Una vez que se produzca el ingreso del dinero por la zona industrial, ¿en qué se va a invertir el dinero, tiene confeccionado ya un plan de obras?
- Sería interminable enumerar todas las obras que queremos hacer. En total son unos 30 millones de euros los que tenemos en proyecto, proyectos redactados de alumbrado público, ampliación del Instituto de San Bartolomé, glorieta de Güime, cubierta de gradas del campo de fútbol de San Bartolomé, guardería de Playa Honda..., es decir, un número incontable de obras y de calles que hay que asfaltar.
- Por cierto, ¿no le parece necesario buscarle una nueva ubicación al tanatorio? Lo digo porque está enfrente de la Casa Cerdeña y a veces coinciden actos culturales con el dolor de los familiares de algún fallecido.
- Pues sí, tiene toda la razón del mundo. Hemos tenido la mala experiencia con las fiestas patronales, que se celebraron cerca del tanatorio. Hubo que poner la música baja o dejar de hacer actividades. El tanatorio está en el peor sitio de San Bartolomé, pero tenemos previsto trasladarlo a las inmediaciones del cementerio con una capilla incluida. Tenemos localizada la finca para hacer un tanatorio en perfectas condiciones, porque el actual carece de muchas cosas.