La consejera de Medio Ambiente y Reserva de la Biosfera del Cabildo de Lanzarote, Elena Solís, ha iniciado una ronda de reuniones con vecinos, vecinas y asociaciones para buscar "soluciones a la masificación turística en Famara".
“Mi objetivo es empezar en Lanzarote un proceso participativo en ordenación de los recursos naturales. Es una prioridad para mí resolver el problema de carga que se vive en Famara y quiero que la vecindad y los sectores implicados tengan voz y sean los que decidan qué hacer para solucionar los inconvenientes que genera la gran afluencia turística a la zona”, ha manifestado Solís.
Entre las personas asistentes a un primer encuentro celebrado este jueves en el Centro Sociocultural del pueblo, se encontraban miembros de la Asociación de Vecinos de Caleta de Famara, Ecologistas en Acción, Desert Watch y de la Asociación Papa Cría, así como representantes de escuelas de surf y otros residentes de la Caleta y Los Noruegos.
“Yo soy un instrumento para ustedes”, reiteró la consejera de Medio Ambiente durante la reunión, en la que la vecindad expuso los principales problemas que, a su juicio, "se están registrando en esta reserva natural".
"La masificación de vehículos de todo tipo incluyendo caravanas y autocaravanas, la falta de zonas de descarga de aguas negras y blancas para éstas últimas y las conductas “incívicas” a la hora de aparcar" fueron algunas cuestiones que pusieron sobre la mesa. Asuntos que consideran que "dificultan la labor de las escuelas de surf", que son el “motor dinamizador” del pueblo.
Asimismo, los afectados hicieron hincapié en "la falta de vigilancia y en la proliferación de botellones en las dunas en épocas de festejos". “Estamos perdiendo el encanto del pueblo marinero y eso es lo que la gente viene a ver aquí, es lo que vienen a buscar”, lamentaron los vecinos y vecinas, que dijeron sentir que el pueblo “está abandonado”. En este sentido, manifestaron estar cansados de la “desidia” y la falta de atención por parte de las autoridades y agradecieron que la consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote se haya acercado a la ciudadanía para buscar soluciones.
Al respecto, uno de los primeros pasos que va a dar Elena Solís desde el Cabildo va a ser "encargar un estudio de impacto de la carga turística de Famara como instrumento de legitimización junto con la opinión del pueblo de sus futuras actuaciones".
Asimismo, existe un proyecto en la primer institución insular, anterior a su llegada al grupo de gobierno, para balizar el litoral y evitar con ello que los vehículos invadan las dunas, que “es el hábitat de flora autóctona en peligro de extinción”. Un proyecto que Solís ha afirmado que se modificará si así lo requiere la ciudadanía. “No voy a prohibir ni imponer nada que los vecinos de Famara no quieran” ha concluido la consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote.