El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que acaba de eliminar las ayudas a la desalación de agua en Canarias, tenía un criterio bien distinto hace sólo tres meses. En un escrito dirigido a la Federación Canaria de Islas, remitido el pasado 4 de julio, el director general del Agua aseguraba que "la intención del Ministerio es mantener esta línea de subvención".
Así respondió a una carta de la FECAI, que en junio pidió explicaciones sobre los recortes y previsiones presupuestarias de las subvenciones a la desalación de agua en el archipiélago. En su respuesta, a la que ha tenido acceso ahora La Voz, el Ministerio hacía referencia a los 4,8 millones presupuestados para 2012 (una cifra muy inferior a la de años anteriores) y anunciaba además que ésta partida podría aumentar en el futuro.
"En ejercicios sucesivos se procederá por parte del Ministerio al estudio de la viabilidad del incremento de la cuantía de la subvención a la desalación de agua de mar en Canarias, con el fin de aproximarla a la cuantía de ejercicios anteriores, aunque siempre dentro de las disponibilidades presupuestarias", señalaba el escrito dirigido a la FECAI. Sin embargo, lejos de "incrementar la cuantía", el Gobierno central ha hecho desaparecer esta ayuda del anteproyecto de los Presupuestos del Estado para 2013.
"Los precios deben ser comparables a los de la península"
El pasado mes de julio, el Ministerio del que depende esta partida "tranquilizaba" a la Federación Canaria de Islas asegurando que "el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente siempre ha aceptado la consideración de que los precios del agua en las Islas Canarias deben ser comparables a los de la península" y, por ello, recordaba que desde hace años se arbitraron "medidas financieras para lograr equiparar los precios, a través de subvenciones a la producción de agua desalada".
En ese escrito, el Ministerio reconocía la importancia de esta subvención, señalando que su objetivo era "abaratar el precio final del agua potable en Canarias, tratando de aproximarlo al precio medio del agua en la península".
Ahora, con la desaparición total de estas ayudas, el Cabildo ha advertido que el Gobierno central deja en una situación "catastrófica" a las islas de Lanzarote y Fuerteventura, que son las que "dependen al 100 por 100 de la desalación de agua de mar para el consumo humano".
Por eso, el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, llamaba a plantar cara a este nuevo recorte, que se suma a los aplicados a esta subvención en los dos últimos años. "Debemos rebelarnos ante lo que es un atentado contra el derecho constitucional a compensar el coste de lo básico y esencial para la vida como es el agua, y esta decisión del Gobierno del PP en los PGE constituye un atentado a la vida en las Canarias orientales", señalaba San Ginés.
Además, pedía a los diputados y los senadores del PP, así como su presidente en Canarias y ministro de Industria y Turismo, José Manuel Soria, que se sumaran a esta reivindicación, para lanzar un "basta ya fulminante al maltrato presupuestario contra la Isla".
