La presidenta del Cabildo, Manuela Armas, ha viajado a Madrid junto al consejero de Obras Públicas, Fabián Martín,para reunirse este miércoles con representantes del Ministerio de Fomento y así exponer la situación de la compañía Naviera Armas, cuya línea marítima entre los puerto de Arrecife y de Tarfaya (Marruecos) ha sido paralizada. Según ha explicado el consejero de Obras Públicas, la reunión se ha centrado en "las condiciones del puerto de Arrecife como puerto Schengen".
La respuesta, de momento, tendrá que esperar "dos o tres días", tal y como ha apuntado Martín. "Ellos han aceptado las explicaciones de buen grado, ahora estamos pendientes de nuevas noticias, no hay nada seguro".
La Delegación del Gobierno en Canarias ha exigido algunas instalaciones para el puerto de Arrecife, como un calabozo o una vivienda para posibles refugiados políticos.
Sin embargo, tal y como aclaró la Cámara de Comercio de Lanzarote la semana pasada, el puerto de Arrecife es un puerto Schengen, y al ser puesto fronterizo, las personas de terceros países que no pertenecen al convenio, "deberán pasar el control fronterizo, tanto si vienen en un crucero de gran lujo como en transbordadores de menor tamaño". Por lo tanto, según los empresarios lanzaroteños, "cualquier barco de pasajeros y mercancías que proceda de terceros países podrá atracar en el puerto de Arrecife de igual forma que lo han hecho los cruceros hasta ahora, y pasar el control fronterizo siempre que cumplan con los requisitos de visado necesarios".
