En esta ocasión, el Coso arrancó, pasadas las cinco de la tarde, recorriendo las avenidas, en un paseo donde no faltó la música, el baile, las máscaras y, por supuesto, los disfraces. Casi una veintena de carrozas desfilaron con sus mejores galas, derrochando alegría, felicidad y humor, que hicieron las delicias del público asistente.
Cientos de personas se congregaron a lo largo de las avenidas para ver pasar el mundo de ilusión que, como cada año, las asociaciones, organizaciones, empresas y amigos, crean para conmemorar la victoria de Don Carnal sobre Doña Cuaresma.
Las mascaritas fueron, realmente, las protagonistas de esta edición del Carnaval en Teguise. Los disfraces más disparatados y divertidos se dieron cita la tarde del sábado para participar de la fantasía y el color que vivió el municipio con el Coso Carnavalero. El ingenio y la imaginación estuvieron presentes durante todo el recorrido gracias a la fantasía que nos presentaban las 14 carrrozas que participaron.
Además, el ritmo de las comparsas, las batucadas y murgas no dejó de sonar ni un solo momento durante todo el recorrido, a ritmo de salsa. Las Pananderas de Pao y Los Diabletes de Teguise tampoco quisieron perderse, en esta ocasión, el Coso de Teguise. El tiempo acompañó en todo momento, y el viento que sopló no resto la brillantez a la cita.
