El Cabildo de Lanzarote está buscando una nueva ubicación para las garzas de Arrecife, que empezaron a ser un quebradero de cabeza para las instituciones en la pasada década. En el año 2009 se habilitó un recinto junto al Cabildo, donde se logró que se trasladaran estas aves que habían "tomado" el parque Ramírez Cerdá. Ahora, cinco años después, el Cabildo se plantea de nuevo su traslado "a un lugar que no moleste a la población residente".
Según explican en un comunicado, el Cabildo y el Ayuntamiento de Arrecife están analizando juntos el tema, "con el asesoramiento de la Sociedad Española de Ornitología SEO/Bird Life". Y la primera opción que se baraja es "el posible traslado de las aves a una bolsa de suelo que tiene el Consistorio capitalino en las inmediaciones de la escombrera".
Mientras tanto, el Cabildo ha anunciado que está "limpiando, podando, desinsectando, regando la flora y rehabilitando" el actual recinto, donde hay unos 500 ejemplares. Estas tareas las coordina el Departamento de Medio Ambiente del Cabildo y se realizan a través del Convenio Marco de Colaboración entre el Cabildo de Lanzarote y la Empresa de Transformación Agraria SA (TRAGSA).
Desde el Cabildo recuerdan que este espacio se creó para trasladar estos ejemplares del centro de Arrecife, "donde se instalaron de forma salvaje, para evitar los problemas que estaban causando a la población residente". Cuando se mudaron se valló el perímetro de la zona; se plantaron especies arbóreas y arbustos similares a los del parque capitalino Ramírez Cerdá, centro principal del asentamiento. También se colocaron pantallas anti ruido, posaderos artificiales; reclamos artificiales de garcilla y se construyó una charca artificial.
Pese a que desde el Cabildo señalan que esta instalación "periódicamente se mejora", el deterioro es evidente. Ahora, las tareas que va a acometer incluyen también limpieza de escombros, replantar, crear un sistema de riego y la rehabilitación del espacio degradado.