Al Consistorio de San Bartolomé no se le va a escapar ni una venta de solar o de casa en su término municipal, porque de todas ellas, obtendrá un beneficio. Ese es el objetivo del convenio de colaboración que este lunes firmaron Miguel Martín, alcalde de San Bartolomé y el edil de Hacienda, Javier Betancort, con el Colegio Oficial de Registradores de la Propiedad y Mercantil de Canarias, mediante el cual, el Ayuntamiento tendrá un control sobre las operaciones de compra y venta de bienes inmuebles que se realicen en el municipio.
Con esta inspección la administración municipal podrá cobrar el impuesto de plusvalía, que se genera con la revalorización de los terrenos de naturaleza urbana siempre que se hace una venta y que hasta ahora, el Ayuntamiento no percibía en la mayoría de los casos. En virtud de este convenio, el Registro obtendrá un porcentaje del impuesto que el que compra o vende, tenga que pagar en ese momento. Si el implicado en la operación no hace efectiva esa cantidad, el Consistorio tendrá conocimiento y podrá poner en marcha las vías para cobrar ese dinero.
El Alcalde de San Bartolomé se mostró satisfecho con el acuerdo porque, según declaró "es un beneficio para los ciudadanos" y considera buena "la colaboración entre instituciones". Para Javier Betancort, ese acuerdo supone "evitar un fraude al tiempo que una importante colaboración entre los dos organismos". El edil de Hacienda apuntó que el Ayuntamiento ha podido dejar de ingresar por este concepto, entre el 50 y el 70 por ciento de lo que se viene recaudando hasta ahora.
