FOTOS: Sergio Betancort
La falta de guardias para vigilar el Islote de la Fermina ha supuesto el deterioro de este espacio, que lleva años a merced de robos y actos vandálicos. "Se ha deteriorado una barbaridad", afirmó el alcalde de Arrecife, Manolo Fajardo Feo. "Me da mucha lástima, después de meter tantos cuartos de la administración pública. Por no haber mantenido con un guardia o alguien que cuidara la instalación hasta determinar qué hacer con ella, si gestionarla directamente o sacarla a concurso, se ha producido un deterioro que no sé lo que va a costar, pero muchos cuartos", indicó.
Por ello, la apertura del Islote de la Fermina se va retrasando cada vez más en el tiempo, mientras la instalación se deteriora día a día. Los vecinos llevan escuchando que este lugar va a abrirse de manera inminente desde 2008.
El problema, según el alcalde, "es que no hay un duro para arreglar y renovar el espacio". Por ello, el plan que existe ahora es tratar de que un inversor privado se haga cargo del Islote y se le permita "una concesión administrativa".
Esto, según reconoció el propio alcalde, "es complicadísimo" y culpó de esta situación "a la falta de gestión y de rigor en otra época". Fajardo Feo hizo un repaso a la cronología del Islote de la Fermina, que se terminó cuando él era consejero de Turismo del Gobierno de Canarias.
"Posteriormente, Rita Martín entregó la obra a la Autoridad Portuaria", afirmó. Pero, previamente, el islote estuvo "a punto de acabarse", siendo alcalde José María Espino. "No se acabó por falta de recursos. Juan Carlos Becerra retomó ese proyecto y me pareció razonable y loable, pero hubo una modificación que no lo admitía ni el Plan General ni la Autoridad Portuaria", explicó el alcalde.
Cuando Fajardo Feo se convirtió en consejero de Turismo decidió retomar el proyecto "de Manrique". "Lo que hicimos por indicación mía fue tratar de buscar a los técnicos que hicieron el proyecto con Manrique e, incluso, al director de obras. Buscamos el estudio, "Siete", en Las Palmas y se hizo el proyecto de mejora", relató.
Cuando se terminaron las obras, el Gobierno de Canarias se las entregó a la Autoridad Portuaria y, posteriormente, tuvo que hacer esta entrega a Costas al cambiar la competencia. Fue durante este tránsito de tiempo, según el alcalde, cuando el Islote se "dejó sin guardias" y se llenó de destrozos y residuos.
Por ello, Manolo Fajardo Feo reconoció que la situación de este Islote de la Fermina, que aún no ha podido ser disfrutado por los ciudadanos, es "sangrante y una barbaridad".
