Dos viviendas de las nueve que están apuntaladas en el barrio de Titerroy "probablemente" serán desalojadas para evitar "desgracias", como la que se produjo en 2009, cuando murió un joven al que se le cayó encima el techo de su casa. Así lo ha manifestado el concejal de Vivienda del Ayuntamiento de Arrecife, Rafael Juan González, que aunque ha indicado que los informes aún "no están escritos", los técnicos municipales ya han adelantado que es posible que estas dos casas sean desalojadas.
El concejal está a la espera de los informes técnicos, que estarán elaborados "esta semana", para "ver la gravedad" de las anomalías de estas viviendas y determinar si "hay que desalojar". "Cuando hay una situación de riesgo o de ruina inminente hay que hacer un desalojo, es obligatorio para evitar desgracias mayores. Hemos revisado las casas apuntaladas y hay que seguir en alerta, pendientes de las grietas y de otras anomalías. Cuando la cosa esté complicada, no quedará más remedio que desalojar", ha indicado.
"Ahora se iniciará el informe y se verá si hay que declarar en ruinas la vivienda y si se aconseja el desalojo. Entonces, haremos los estudios sociales pertinentes para realojar a estas personas, aunque no hay que olvidar que son casas particulares", ha señalado el edil. En este sentido, ha explicado que el Ayuntamiento ya está pagando en torno a "350 o 400 euros de alquiler a dos personas realojadas", que vivían en la vivienda donde falleció el joven.
Por tanto, las personas que probablemente tengan que abandonar sus casas, serán "realojadas si reúnen las condiciones". "El Ayuntamiento asumiría el alquiler", ha avanzado, al tiempo que ha señalado que continuará realizando "un seguimiento a las viviendas afectadas". "Enviaremos informes al Gobierno de Canarias y al Estado para que agilicen esta área de rehabilitación y lo haremos de forma reiterada".
