"El plazo para mantener el secreto de sumario es ilimitado", según han señalado fuentes jurídicas a La Voz. Es decir, que no se puede determinar cuándo trascenderán todos los detalles que han rodeado a esta operación. Para alargarlo en el tiempo, debe estar justificado el avance de la investigación, y tener indicios sólidos contra los imputados, ya que ese "secreto" limita su capacidad de defensa.
En cualquier caso, la fase de instrucción en la que se encuentra actualmente el proceso podría durar aproximadamente un año o año y medio, a lo que habría que sumar otros seis meses hasta llegar a juicio. En definitiva, el plazo aproximado para resolver la situación de los imputados rondaría los dos años. Eso, siempre que la investigación no se siga ampliando, abriendo nuevos frentes que alargarían el proceso de instrucción, pero a su vez arrojarían más luz sobre esta presunta trama de corrupción.