Siete de los diez integrantes de la junta de gobierno del Colegio de Abogados de Lanzarote han decidido renunciar a sus cargos "de manera irrevocable". En su escrito, registrado el pasado día 23 de diciembre, los letrados denuncian la "falta de unidad y confianza" dentro de esa junta de gobierno, presidida por Carlos Viña. Según afirman, "han sido muchas las decisiones tomadas al margen de un consenso y sin siquiera previamente haber sido informados de las mismas".
Los abogados que han presentado su renuncia son Raquel Socas Vega, Agustín Márquez Cabrera, Arielh Guadalupe Páez, Leticia María Grimón Rodríguez, María Teresa Borges Martín, Magdalena Nieto Fajardo y Nieves Sánchez Ferrer. Así, en la junta de gobierno se mantienen solo el decano, Carlos Viña, y los letrados Rosa García, que ocupa el cargo de secretaria, y Santiago Ruiz Menéndez.
Ahora, al haber renunciado más de la mitad de los miembros de la Junta de Gobierno, los firmantes del escrito consideran que deberían celebrarse unas nuevas elecciones. En su defecto, según lo dispuesto en los estatutos, reclaman que se convoque una Junta General Extraordinaria para elegir a los nuevos abogados que ocuparán las vacantes. Entre los letrados que han renunciado a sus puestos se encuentran la que era vicedecana y diputada primera del Colegio de Abogados (Raquel Socas), el tesorero (Agustín Márquez) y el bibliotecario-contador (Arielh Guadalupe Páez). Además, piden que se informe al Consejo Canario del Colegio de Abogados o al Consejo General de la Abogacía Española, para se nombre una junta provisional.
Ningún miembro de la Junta pertenecía a la plancha de Viña
Las últimas elecciones para renovar la dirección del Colegio de Abogados de Lanzarote se celebraron hace dos años, en diciembre de 2013. En ese momento, como decano resultó elegido Carlos Viñas, aunque en la junta no logró entrar nadie más de la plancha con la que se presentó a esas elecciones. Ahora, de esos 9 abogados que se incorporaron a este órgano junto a Viñas, 7 han decidido renunciar.
"Tomamos posesión de nuestros respectivos cargos con toda la ilusión y todas ganas posibles de trabajar por y para el colectivo que había depositado su confianza en nosotros", señalan en su escrito. Sin embargo, agregan que "poco a poco esa ilusión y esas ganas" fueron "desapareciendo", llevándoles ahora a tomar esta decisión.
"Consideramos que dentro de esa junta de gobierno no existe la unidad y confianza que ha de ser el pilar en el que se funde un órgano colegiado y que debe regir la buena marcha de una institución y un colectivo con intereses tan importantes en juego", insisten, afirmando que se han tomado "muchas decisiones" sin contar con ellos. Al respecto, subrayan que "las opiniones, propuestas o ideas individuales son muy valiosas, pero las mismas han de ser objeto de debate y consenso, actuando, siempre, conforme a las mayorías que prevén nuestros estatutos", cosa que consideran que no ha sucedido.
Por eso, han decidido renunciar a sus cargos. "La decisión no es nada fácil y ha sido fruto de una dura meditación llevada a cabo en los últimos meses", afirman, concluyendo que finalmente la han adoptado "con la convicción de que es la mejor para los intereses del Colegio de Abogados de Lanzarote y de todos y cada uno de los compañeros que forman parte del mismo".
